Reclutan chicos para ciberhumanos

0

Varias decenas de emprendedores tecnológicos, estudiantes de sistemas y diseñadores de sitios Web cruzaron la frontera de lo puramente humano y se animaron a insertarse un chip debajo de la piel, a la altura de una de sus muñecas. Se convirtieron así en cíborgs o ciberhumanos. La movida la lleva adelante el hacker sueco Hannes Sjoblad, quien convoca a las multitudes futuristas por las redes sociales.

El implante funciona como un programa de seguridad vía radiofrecuencia (tecnología conocida como RFID), que les permite a estos entusiastas abrir la puerta de su casa sin llave, aunque para ello tengan que cambiar el mecanismo de cierre. También pueden desbloquear fácilmente cualquier smartphone que funcione con el sistema operativo Android.

Los voluntarios creen que hay mucho más potencial, más allá de esto. “Creo que acabamos de empezar a descubrir las cosas que podemos hacer. Hay mucho potencial para registrar la vida diaria. En lugar de introducir datos en el celular, cuando lo deje sobre la mesa de luz y lo toque con mi implante sabrá que me voy a la cama”, describió Sjoblad a la cadena de noticias BBC .

“Imaginemos que haya sensores alrededor en un gimnasio que reconozcan, por ejemplo, quién está usando las pesas a través del chip de la mano”, continuó el hacker.

La última convocatoria de Sjoblad fue en noviembre, cuando logró reunir a 8 voluntarios en el local de tatuajes Swahili Bobs, de Suecia. Allí armó, según sus palabras, una “fiesta de implantes” nocturna. El grupo de Sjoblad lo componen ahora unos 50 cíborgs. “Después habrá 1.000, después 10.000. Estoy convencido de que esta tecnología está aquí para quedarse y que no nos parecerá nada raro tener un implante en la mano”, dijo.

El hacker sueco espera que su fiesta de implantes sirva para generar un debate sobre un posible futuro con cíborgs. “La idea es convertirnos en una comunidad, por eso nos ponemos los implantes juntos”, explica.

Los inseguros no tiene por qué temer. Quienes se arrepientan sobre llevar un chip dentro de su cuerpo que los comunica con todo lo que los rodea, se lo pueden quitar. El procedimiento de implante es reversible y sólo lleva cinco minutos. Pero Sjoblad no tiene intención de quitárselo. “Llevamos 20 años poniendo chips en animales”, recuerda. Ahora es el turno de los humanos.

“Esto es algo divertido, para crear conversaciones. Abre discusiones interesantes sobre qué significa ser humano. Esto no es sólo para abrir una mano sin la llave”, explicó el hacker sueco.

Hay otros ciberhumanos más cerca. Mucha gente que ha perdido una extremidad recibe prótesis biónicas, las cuales son cada vez más sofisticadas. Y ya no sorprende que a alguien le implanten una cadera artificial o se utilice tecnología láser para corregir problemas de visión.

La firma estadounidense MC10 sella un tatuaje digital sobre las personas que recolecta información sobre temperatura corporal, niveles de hidratación y la exposición a rayos ultravioleta.

Fuente: El Clarin

Comments are closed.