Por Álvaro Delgado
En poco más de dos semanas habrá elecciones en seis estados, las primeras con Andrés Manuel López Obrador como presidente, y ya se perfila un escenario parecido al de 2018: Morena en ascenso; el PAN en caída y el PRI, agónico.
La jornada electoral del 2 de junio, a medio año del inicio del gobierno de López Obrador, consolidaría la hegemonía de Morena, que seguramente arrebatará al PAN los gobiernos de Baja California y Puebla —así como municipios y diputaciones en Quintana Roo, Durango, Tamaulipas y Aguascalientes—, pero también será un termómetro sobre el respaldo popular al Presidente.
Desde abril circulan encuestas que registran una erosión de hasta 10 puntos en el apoyo de los mexicanos a López Obrador, después de que alcanzó su máximo en enero —en plena ofensiva contra el robo de combustibles—, aunque su calificación sigue siendo muy alta.
En tanto que Morena está asociado a López Obrador, el cumplimiento de las promesas de campaña de éste es una variable en estas elecciones locales, aunque en Baja California y Puebla el propio PAN asume su derrota, esperanzado sólo en que sea tan aplastante.
El 23 de abril, El Heraldo de México publicó la encuesta de Buendía&Laredo, que registró un apoyo a Bonilla de 50 puntos por 16 del panista Oscar Vega, cinco del perredista Jaime Martínez Veloz y cuatro del candidato del PRI, Enrique Acosta.
Y ayer nuestro diario publicó la encuesta de De las Heras Demotecnia en Mexicali, que registró 51 punto de preferencia para la candidata de Morena, María del Pilar Ávila, por 32 del panista Gustavo Sánchez y la del PRI, Guadalupe Gutiérrez, apenas seis.
Aunque habrá aún variaciones en los porcentajes, la tendencia en Baja California es que vivirá una elección parecida a la de 2018, cuando Morena arrasó en la presidencial, diputaciones federales y senadurías, y ahora aplastará al PAN en gubernatura, alcaldías y diputaciones locales, con el PRI con la peor votación de su historia.
En Puebla, en la elección extraordinaria de gobernador y cinco ayuntamientos, también hay un mismo escenario: Miguel Barbosa, de Morena, tiene una ventaja de al menos dos a uno sobre Enrique Cárdenas, candidato del PAN, mientras que el priista Alberto Jiménez está en un lejano tercer sitio.
Hace 15 días, Opina/El Heraldo registraron 61 puntos para Barbosa, 26 para Cárdenas y 10 para Jiménez, una tendencia que, igual que en Baja California, nadie apuesta a que se modificará antes del 2 de junio.
En estas elecciones Morena estrena como aliado al Partido Verde, controlado por Manuel Velasco que trama ser secretario de Gobernación, también predominan los conflictos internos en el partido de López Obrador y la disputa es sólo con el PAN.
Y aunque Tamaulipas y Quintana Roo, donde se elegirán diputados locales, y Durango y Aguascalientes, donde se disputan ayuntamientos, son gobernados por el PAN, López Obrador arrasó en 2018 y es un hecho que Morena desplazará como segunda fuerza al ya irrelevante PRI.
Fuente: El Heraldo de México
1 Comment
Ojalá también lis estados de hidalgo y el estado de México y con eso le damos natarili al primer con este ultimo virreinato de lis virreyes priístas