La caravana de migrantes que se dirige a través de México a EE. UU. crece en número
Un grupo de miles de migrantes que han salido a pie hacia los Estados Unidos desde el sur de México está creciendo constantemente en tamaño.
Su organizador dice que alrededor de 7.000 personas ahora consen esta caravana de migrantes, en comparación con las 5.000 de hace solo unos días.
La mayoría de ellos son de América Central y del Sur, dicen los grupos de ayuda locales.
El presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, se reunirá con los líderes de la región el viernes para discutir cómo frenar el flujo de migrantes a los Estados Unidos.
El presidente Biden ha sido atacado por su manejo de la migración, en particular en la frontera entre Estados Unidos y México.
Los republicanos dicen que no está haciendo lo suficiente para detener el flujo y los alcaldes demócratas, cuyas ciudades han visto una afluencia después de que los gobernadores republicanos llevaran a los migrantes recién llegados allí, se han unido a las críticas, diciendo que sus ciudades no pueden albergarlos y alimentarlos.
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El número de personas detenidas en la frontera sur de los Estados Unidos superó los 2 millones tanto en el año fiscal 2022 como en el de 2023.
Solo en septiembre de 2023, la Patrulla Fronteriza de los Estados Unidos detuvo ilegalmente a más de 200.000 migrantes que cruzaron la frontera entre Estados Unidos y México, según las cifras de Seguridad Nacional de los Estados Unidos.
Aquellos que se han unido a la caravana de migrantes, que salió de la ciudad de Tapachula el lunes, dicen que están decididos a llegar a los Estados Unidos.
“En Venezuela las cosas son muy difíciles, no podemos vivir con el dinero que tenemos, no es suficiente para nosotros, y es por eso que vamos a los Estados Unidos”, dijo un padre venezolano que se estaba embarcando en la larga caminata con su esposa y sus dos hijas a la agencia de noticias Reuters.
Uno de los organizadores de la caravana, Irineo Mújica de la ONG Pueblo sin Fronteras, dijo que los migrantes habían salido juntos después de haber sido dejados “atrapados” por las autoridades mexicanas en el cada vez más peligroso estado de Chiapas.
“El crimen organizado ya se está apoderando de Chiapas, la violencia está en todas partes. Estamos tratando de salvar vidas con este tipo de acciones”, dijo sobre la caravana.
Un migrante de Honduras le dijo al periódico mexicano La Jornada que decidió unirse a la caminata hacia el norte después de haber esperado en vano un permiso de tránsito para cruzar México.
“No podía seguir esperando sin dinero, durmiendo en la calle, eso no es una vida. Es mejor que nos dirijamos [hacia el norte]y esperemos que el gobierno [mexicano]nos ayude, no nos detenga”.
Algunas caravanas anteriores se han enfrentado con la policía mexicana, que trató de evitar que caminaran por las principales carreteras.
