Uno de los 43 normalistas era militar activo, insiste Secretario de Defensa

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Julio César López Patolzin era estudiante de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa pero también soldado.  Esto lo confirmó el secretario de la Defensa Nacional, el general Salvador Cienfuegos Zepeda en una entrevista con Noticieros Televisa. La familia del normalista, sin embargo, afirma que el normalista había desertado tiempo atrás y reprocharon la insistencia del general Cientofuegos en hablar de ello.

En una conversación con el periodista Santos Mondragón, Cienfuegos declaró que el nombre de uno de estos jóvenes desaparecidos coincide con el de un militar en activo y que aún no se ha localizado.

“Debo reconocer que estamos hablando prácticamente de la misma persona. Entonces la respuesta en concreto es sí coincide el nombre con uno de los 43 desaparecidos y creemos que es la misma persona”, puntualizó.

Desde junio pasado, la revista Proceso había dado a conocer que uno de los 43 desaparecidos era un soldado y que Rafael López Catarino, su padre, había confirmado que era soldado pero que había desertado hace un año para ingresar a la Escuela Normal Rural Raúl Isidro Burgos.

Incluso, según el reportaje de Proceso, el padre del soldado ha reprochado a las autoridades el hecho de que hasta ahora no se haya esclarecido el tema del teléfono móvil de su hijo,  que seguía activo después de la desaparición de los estudiantes y que, de acuerdo con el rastreo satelital, se ubicó por última vez en las instalaciones del 27 Batallón de Infantería con sede en Iguala.

Una vez que Cienfuegos reconoció que el nombre de uno de los desaparecidos coincidía con el de un soldado en activo, el secretario de la Defensa Nacional minimizó el hecho al señalar “que esto no era nada extraño porque los comandantes de los diferentes niveles tienen la autorización por reglamento de autorizar a los soldados de estudiar siempre y cuando no interfiera en su actividad de servicio”, explicó.

“A este muchacho le autorizaron estudiar. Él tenía dos o tres meses de haber ingresado a la Normal y quería estudiar para ser maestro. Hago la aclaración porque dicen que a lo mejor era alguien que estaba sirviendo de espía, en dos o tres meses que tenía ahí, pues no podía haber servido de nada”, agregó.

Al momento de ser desaparecido, López Patolzin tenía 25 años. Es originario de Tixtla, Guerrero.

“A Julio le gustaba estudiar porque quería sobresalir y ayudar a sus padres”, han relatado algunos de sus compañeros en diferentes medios.

En una de sus libretas, a la que tuvo acceso Diario Milenio, Patolzin escribió el 28 de agosto de 2014, un mes antes de desaparecer:

“Mis habilidades es ser responsable tanto en lo académico, trato de poner mucha atención a los maestros para poder sobresalir adelante”.

En otra parte de la libreta, como parte de sus actividades académicas, anotó el nombre del director de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa: “José Luis Hernández Rivera. Sociedad de Alumnos Ricardo Flores Magón”. El apunte termina con su nombre: “Julio César López Patolzin”.

En la misma entrevista difundida por Televisa, Cienfuegos Zepeda expresó su total rechazo a que el grupo de expertos de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) interrogue a los soldados del 27 Batallón de Infantería señalados por su participación en los hechos del 26 de septiembre en Iguala, Guerrero.

Según dijo, a los militares los quieren interrogar para después hacer sentir que tienen algo que ver en la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa y no apoyarlos. Por ello, dijo tajante, que se opone a que los militares sean interrogados.

“Esa es mi posición y de ahí creo que no puedo ni debo salirme porque perdería mucho de lo que soy, de lo que soy en este momento y de lo que he sido durante 52 años prácticamente de carrera militar. No tengo nada que esconder, no he cometido nada así que va por delante mi prestigio”, afirmó el titular de la Sedena (Secretaría de la Defensa Nacional).

A principios de esta semana, la Procuraduría General de la República (PGR) ofreció una recompensa de hasta dos millones y medio de pesos a quien proporcione información que lleve a la detención de cinco probables responsables de delitos en agravio de los 43 estudiantes de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa.

La desaparición de los 43 jóvenes ocurrió en Iguala la noche del 26 de septiembre. La policía municipal de Iguala persiguió y atacó a los estudiantes de la Normal.

Según la versión oficial de la Fiscalía, los oficiales entregaron a integrantes del cártel Guerreros Unidos a los estudiantes, a quienes asesinaron e incineraron en el basurero de Cocula.

Los familiares de las víctimas se niegan a aceptar esta versión y apoyados por organizaciones de derechos humanos, exigen que les regresen a sus familiares vivos.

Fuente: UNIVISION

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