El presidente Andrés Manuel López Obrador pidió a líderes obreros que se respete la ley y no exista la simulación.
“Que, como aquí lo mencionó don Carlos Aceves, se respete la ley, que al margen de la ley nada y por encima de la ley nadie”, dijo durante una comida en palacio nacional por el Día del Trabajo.
“Y que no haya simulación, porque heredamos desgraciadamente del Porfiriato esa mala costumbre de respetar la Constitución en la forma para violarla en el fondo”.
El presidente pidió a todos los líderes sindicales actuar con apego a la ley y recalcó la importancia de las reformas de su Gobierno.
“Si nosotros hablamos de llevar a cabo la cuarta transformación del País, correspondía plantear una nueva Constitución, pero resolvimos mejor llevar a cabo profundas reformas a la ley suprema, a la Constitución vigente”, dijo.
“Optamos por eso porque consideramos que era posible, con el marco jurídico actual, hacer los cambios y adaptar la legalidad a las nuevas circunstancias”.
El mandatario agradeció el apoyo de legisladores federales y locales de todas las corrientes y partidos hacia las nuevas reformas.
“Aprobamos modificaciones para combatir la corrupción, para desterrar la corrupción. Es increíble, pero la corrupción no era considerado como una falta, como un delito grave”, aseguró.
“Está por aprobarse el quitar el fuero. Esto también viene de tiempo atrás”.
Ofrece respeto a autonomía sindical
El Presidente recalcó el apoyo del sector obrero a la reforma laboral y les aseguró que su Gobierno actuará con respeto a la autonomía sindical.
“El que el sector obrero haya apoyado esta reforma (laboral) es entender que ya no se puede poner vino viejo en botellas nuevas”, dijo.
“Por eso es importante decirles que nosotros vamos a actuar con mucho respeto a la autonomía sindical, porque es de ida y vuelta, no sólo es decirles a ustedes: democratícense y el Gobierno va a estar dando indicaciones y va a tener injerencia en la vida de los sindicatos o va a tener dirigentes favoritos. Ya no se va a actuar de esa manera, respeto a la autonomía, ya no hay tutelaje, los trabajadores ya no son menores de edad”, dijo.
López Obrador aseguró que el País es vanguaria en materia laboral a nivel mundial por lo que deben confiar en el pueblo.
“A veces no les gusta a mis adversarios cuando digo que el pueblo es sabio. Tiene inteligencia y un instinto certero, sabe bien lo que no conviene”, indicó.
“Puede que le cueste algún trabajo, pero están convencidos de lo que no hay que hacer. Tengamos confianza, va a salir bien este proceso, este cambio, esta transición”.
El mandatario recalcó que es razonable y prudente la petición de díalogo de Francisco Hernández Juárez, líder del sindicato de telefonistas, para llegar juntos a un cambio en la aplicación de la ley reformada.
“¿Cómo se va a llevar a cabo el cambio de las Juntas de Conciliación a los Tribunales, cómo va a constituirse este nuevo organismo del Poder Judicial para la justicia laboral, el organismo de conciliación para no saturar al Poder Judicial, porque podemos llegar a acuerdos entre los factores de la producción”, dijo.
“Todo esto va a requerir un proceso y lo tenemos que hacer de manera conjunta, estamos en la mejor disposición de que se haga pronto, contamos los recursos, porque es una prioridad, tengo la fortuna, la dicha de contar con un buen equipo”.
Indicó que la Secretaría del Trabajo los va a representar, se ofreció abierto al diálogo y recalcó la importancia de la unidad entre los gremios.
“A esta comida fueron invitados todos, algunos los invitamos y no vinieron y los entiendo porque cuando yo estaban en la Oposición me invitaban y yo no asistía, siempre cuidábamos eso, hasta en las fotos, no se podía uno retratar con cualquier persona”, indicó.
“Comprendemos que no estén aquí todos, ellos tienen sus posturas y, además, hoy es un día extraordinario para protestar, es un día de lucha para recordar cómo se fue avanzando con tanto sacrificio en aquel entonces para la jornada de 8 horas, cómo se ha ido avanzando”.
El presidente celebró la existencia de la oposición y agredació a todos los asistentes.
Fuente: Reforma
