Por John M. Ackerman
La terca insistencia de Enrique Peña Nieto y sus corifeos en ignorar a la sociedad, amenazar a sus adversarios y pactar con personalidades oscuras se encuentra hoy en un punto de quiebre. Los acontecimientos recientes en Michoacán, en Tamaulipas y en las redes sociales revelan el agotamiento de las anticuadas estrategias autoritarias de plata o plomo y ni los veo ni los oigo. Si no hay pronto un cambio de rumbo en la conducción de la política nacional, es probable que México se polarice hasta un punto sin retorno.
El comisionado federal para Michoacán, Alfredo Castillo, ha fracasado olímpicamente en llevar la paz y el estado de derecho a esta entidad convulsionada. En lugar del desarme tan anunciado para el pasado 10 de mayo, solamente se llevó a cabo una desairada ceremonia de entrega de armas a un puñado de nuevos integrantes de la nueva Fuerza Rural Estatal. Esta nueva corporación policial carece de la capacitación y el equipamiento necesarios para resolver los graves problemas de seguridad en el estado. Asimismo, han surgido fuertes cuestionamientos sobre relaciones de los nuevos integrantes con oscuros personajes, como Juan José Farías Álvarez, El Abuelo, y otros supuestamente relacionados con el narcotráfico.
Sin embargo, en una muestra del cinismo más absoluto, Castillo deslindó a las autoridades estatales y federales de cualquier responsabilidad con respecto a la seguridad de Michoacán hacia el futuro. Son ustedes hoy los que tienen la responsabilidad de aquí en delante de defender a sus hermanos, a sus familias, a sus vecinos. Y cuando los reporteros preguntaron a Estanislao Beltrán, Papá Pitufo, quién sería el mando de las fuerzas rurales y cuáles serían los mecanismos de cooperación con el gobierno, el líder se negó a responder, señalando ahorita eso es lo que vamos a ver. Nosotros hemos estado trabajando duro.
En otras palabras, las autoridades públicas abdican de su responsabilidad de garantizar la seguridad de los michoacanos y en su lugar entregan las armas a un grupo de personas de dudosa procedencia con preparación y recursos deficientes. Con razón, el doctor José Manuel Mireles ha rechazado contundentemente formar parte de esta pantomima. Pero en lugar de escuchar y tomar en cuenta a su antiguo aliado Mireles, el régimen ha respondido a su interpelación con amenazas y ataques. La traición del gobierno a Mireles, así como a Hipólito Mora, quien permanece en la cárcel, envía una clara señal a la sociedad de que quien pacta con este régimen será desechado a la primera oportunidad. Papá Pitufo puede desde ahora poner a remojar su abundante barba.
La total sordera del gobierno ante los reclamos de la sociedad para un debate directamente con Peña Nieto y su gabinete sobre las reformas estructurales, y en particular las reformas energética, de telecomunicaciones y electoral, también revela el estado de descomposición de la legitimidad del régimen. La ira aumenta cada día en las redes sociales. Por ejemplo, en protesta por el intento de desviar el debate público hacia un Congreso de la Unión corrompido, así como esconderse atrás de un Google Hangout en un simulado diálogo virtual en Internet, el pasado jueves un amplio grupo de artistas, intelectuales y figuras públicas lanzaron vía Twitter la iniciativa #ContéstameEPN. El tema llegó a ser el primer trending topic en el país durante 24 horas y más de 100 mil mensajes fueron enviados interpelando al Presidente y su gabinete a dar a la cara a la sociedad. En respuesta, el gobierno federal guardó un silencio sepulcral.
La reacción de la sociedad no se hizo esperar. Los próximos dos días, 10 y 11 de mayo, se emitieron un alud de más de 200 mil mensajes con el hashtag #ChingueasuMadreEPN. Esta segunda iniciativa incluso llegó a colocarse entre los temas más comentados en Twitter en el mundo entero.
En el transcurso de apenas cinco meses hemos pasado del Que me pregunten, lanzado por El Grito Más Fuerte en diciembre pasado, al Contéstame y el No te hagas del Congreso Popular, hasta la multitudinaria mentada de madre de la sociedad indignada este pasado fin de semana. Consta el crecimiento de la indignación ciudadana ante la sordera, las mentiras y las simulaciones del gobierno.
En un acto desesperado al final de la ceremonia en Tepalcatepec, Michoacán, este sábado, el comisionado Castillo clausuró el evento con una cita clásica de Bertolt Brecht: Hay hombres que luchan un día y son buenos. Hay otros que luchan muchos días y son mejores. Hay quienes luchan muchos años, y son muy buenos. Pero los hay que luchan toda su vida, esos son los imprescindibles.
Era risible observar el patético espectáculo de un burócrata gris, cuyo único mérito ha sido su fidelidad a un Presidente de la República sin preparación cultural alguna, apropiándose de las palabras de una de las grandes figuras intelectuales de la izquierda para legitimar su pantomima.
Pero la necesidad de recurrir a los héroes de sus adversarios, como en su momento hizo Peña Nieto con Lázaro Cárdenas para justificar la venta del país, también evidencia la total carencia de creatividad, inteligencia y capacidad del régimen actual. El PRI y sus aliados no cuentan con argumentos, ideologías o estrategias propias, sino que simplemente se limitan a cumplir pragmáticamente con órdenes superiores. No lo podemos permitir.
Twitter: @JohnMAckerman
Fuente: La Jornada