Mientras el número de mujeres y niñas centroamericanas que cruzan hacia Estados Unidos sigue aumentando, también está creciendo la sorprendente cantidad de agresiones sexuales que se cometen contra estas migrantes que están en busca de una vida mejor. De acuerdo con una alarmante investigación del medio norteamericano Fusion, el 80 por ciento de las mujeres y niñas que cruzan hacia Estados Unidos a través de México son violadas durante la travesía.
Eso es más que una estimación previa de 60 por ciento, según un informe de Amnistía Internacional. Tan sólo esto año, las autoridades de inmigración creen que más de 70 mil menores de edad llegarán solos a Estados Unidos sin documentos, la mayoría de los cuales provienen de países centroamericanos como El Salvador, Guatemala y Honduras.
El número de niñas centroamericanas que viajan solas y son detenidas en la frontera sur ha superado rápidamente al número de niños, según un estudio realizado en julio por Pew Research. Hasta mayo, el número de niñas solas menores de 18 años que fueron detenidas en la frontera entre Estados Unidos y México aumentó un 77 por ciento.
Pero aunque muchas de estas niñas están huyendo de sus hogares por temor a ser abusadas sexualmente, según el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados, siguen corriendo esa misma suerte en su viaje hacia la libertad.
Una violación puede ser perpetrada por cualquier persona a lo largo del camino, incluyendo guías, otros migrantes, bandidos o funcionarios del gobierno, según Fusion. A veces el sexo se utiliza como una forma de pago cuando las mujeres y niñas no tienen dinero para pagar sobornos.
Los asaltos son tan comunes que muchas mujeres y niñas toman anticonceptivos de antemano como medida preventiva. Lo que es particularmente desconcertante es el hecho de que estas cifras ni siquiera podrían representar la visión completa de esta triste situación.
Hay una unidad en México que se encarga de investigar y procesar los crímenes contra los migrantes, dijo Erin Siegal McIntyre, uno de los periodistas de Fusion que escribió la historia de la agresión sexual, a HuffPost Live.
Aunque miles de mujeres están pasando por México, la unidad informó que sólo ha visto seis casos de asalto contra las mujeres migrantes este año, lo cual incluye el secuestro, la violación y el robo a mano armada.
El problema, dice McIntyre, es que las víctimas están demasiado asustadas como para hacer denuncias debido al estigma que se relaciona con la violación y por el hecho de que podrían ser enviadas de regreso a casa.
“Las mismas autoridades que deberían encargarse de tales querellas también son, en la mayoría de los casos, las que tienen la tarea de reunir a los migrantes y deportarlos de regreso a sus países natales”, dijo McIntyre. “Es muy difícil conseguir que la gente se abra sobre este tipo de cosas”.
Fuente: Sin Embargo/ Huffinton Post
