Una red política establecida por los industriales conservadores Charles y David Koch ha recaudado más de 70 millones de dólares para la competencia política y para ayudar a los republicanos a dejar a un lado a Donald J. Trump, de acuerdo a un funcionario del grupo.
Con parte de esta importante suma de dinero para empezar, la red denominada Estadounidenses a favor de una Acción Próspera, planean lanzarse con todo a la competencia por la nominación presidencial del Partido Republicano, por primera vez en casi 20 años de historia.
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La red gastó casi 500 millones de dólares para apoyar a los candidatos republicanos y políticas conservadoras tan sólo en la elección del 2020.
Dos grupos que están cercanamente afiliados con Charles Koch contribuyeron con 50 millones de dólares de los más de 70 millones que han sido recaudados.
Koch es un importante accionista de Koch Industries, que contribuyó con 25 millones de dólares a Estadounidenses a favor de una Acción Próspera, de acuerdo a un borrador preliminar de los archivos de la Comisión Federal Electoral.
Otros 25 millones de dólares fueron donados por Stand Together, una organización no lucrativa que él fundó.
El objetivo de la red Koch en las primarias presidenciales del 2024, que ha sido descrito sólo indirectamente por escrito en comunicaciones internas, es impedir que Trump gane la nominación republicana.
En febrero, una política de alto rango de la red, Emily Seidel, escribió un memorándum a sus donadores y activistas diciendo que ya era tiempo de “tener un presidente en el 2025 que represente un nuevo capítulo”.
Desde entonces, los votantes republicanos cerraron filas alrededor del expresidente, dándole su apoyo en los sondeos y fortaleciéndolo como favorito después de dos juicios políticos.
Algunos de los donadores más importantes de la política republicana, incluyendo a algunos de la Red Koch, han mantenido su esperanza en el gobernador Ron DeSantis de Florida como el rival más prometedor de Trump.
Aunque DeSantis a desconcertado a muchos donadores con los tropiezos que ha tenido en su campaña y el desplome en las encuestas.
A siete meses de las primarias, la coalición de conservadores Koch sigue buscando a alguien influyente, los acaudalados donadores creen que pueden echar abajo al expresidente.
Fuente: NYT
