Tras reunirse con el presidente de Ecuador, Lenin Moreno, el líder nacional de Morena, Andrés Manuel López Obrador, aseguró que hará que el presidente estadunidense Donald Trump entienda que el problema de la migración no se resuelve construyendo “muros” ni militarizando las fronteras.
En entrevista con medios ecuatorianos, el político tabasqueño anunció que el martes 29 viajará a Los Ángeles, California, para expresar su apoyo a los migrantes contra la embestida de Trump.
“El día 29 de este mes voy a estar en Los Ángeles para volver a expresar nuestro apoyo a los migrantes del mundo, frente a esta embestida de Donald Trump, eso es lo que estamos haciendo, no vamos a faltarle el respeto a Trump, pero lo vamos a hacer entrar en razón, pues no se resuelve nada con muros, no se va a resolver nada militarizando las fronteras, tiene que procurarse la cooperación para el desarrollo”, resaltó.
También dijo que Morena siempre defenderá a los mexicanos que han tenido que emigrar a Estados Unidos “por necesidad”, pues “nadie se va por gusto”. “Pero no sólo a nuestros paisanos estamos defendiendo, estamos defendiendo a todos los migrantes del mundo, porque es un derecho humano el vivir libre de miseria, el buscarse la vida de manera honrada, eso es lo que hacen todos los migrantes, van a buscarse la vida, a trabajar de manera honrada, no son delincuentes y se les debe de respetar”, acotó.
López Obrador igual se refirió al encuentro con el presidente Lenin Moreno, el cual duró hora y media, en el que hablaron sobre el significado de Morena en México, lo que están haciendo para enfrentar “los grandes y graves” problemas del país, sobre todo la corrupción, “que es lo que más daña a México”.
“La única manera de enfrentar este mal es a través de un cambio verdadero, una transformación pacífica, sin violencia, por la vía electoral. Y como ustedes saben, va haber elecciones en México el primero de julio del año próximo, y se va a renovar el gobierno y se va a presentar una oportunidad histórica para lograr un verdadero cambio, una transformación”, indicó.
La charla con Lenin
López Obrador insistió en que platicó con Lenin Moreno sobre procesos electorales, sobre cómo se ponen en marcha desde los grupos de poder las “campañas negras”, la guerra sucia para asustar a los ciudadanos.
“Nosotros hemos padecido eso desde hace años. En nuestro país se acuñó esa frase que luego se aplica a cualquier candidato que para los que no quieren los cambios les significa populismo o que son mesiánicos, es una estrategia mediática que se copia y se aplica en todas partes”, aclaró.
Luego recordó la frase empleada en su contra durante la campaña presidencial de 2006: “López Obrador es un peligro para México”, y que después se la aplicaron al expresidente de Estados Unidos, Barak Obama. Lo hacen, dijo el tabasqueño, “para asustar, para meter miedo”, indicó, aunque celebró que los ciudadanos ya no se dejen llevar por esas campañas “gracias a las redes sociales”.
En sus cuentas de Facebook y Twitter, López Obrador publicó tres fotografías con el presidente ecuatoriano. En una de ellas aparecen, además del tabasqueño y el mandatario, el empresario mexicano Alfonso Romo y la canciller María Fernanda Espinosa. En otra, destaca asomándose con Lenin en un balcón, levantando los brazos y, en una más, saludándolo y mirando muy sonriente a la cámara.
Como encabezado, el tabasqueño escribió: “Terminamos una larga y fraterna conversación con el presidente Lenin Moreno de la República del Ecuador”.
Por su parte, el presidente de Ecuador escribió en su cuenta @Lenin: @lopezobrador_ líder político mexicano me visitó hoy. Los pueblos de ambos países tenemos lazos comunes de larga data”.
Lenin recibió a López Obrador en el Palacio de Carondelet, la residencia oficial del mandatario ecuatoriano que está ubicada en Quito, la capital.
“Esta reunión se enmarca en el interés del mandatario ecuatoriano de sostener encuentros permanentes con líderes de izquierda en Latinoamérica”, difundió por su parte la agencia Andes Info, que también publicó la versión de que Moreno “le deseó éxitos” a López Obrador en su camino por la Presidencia en 2018.
La crisis en Ecuador
López Obrador visitó Ecuador en momentos de una crisis política que se agudizó este jueves, después de que el presidente de ese país, Lenin Moreno, emitió el decreto ejecutivo número 100 para quitarle todas las atribuciones y delegaciones al vicepresidente Jorge Glas, acusándolo de “deslealtad”, tras haber publicado una carta donde critica al Ejecutivo, y también le reprochó una “supuesta alianza con el entorno del destituido gobernante opositor Abdalá Bucaram para manipular “de manera perversa las cifras económicas”, entre otras cosas.
La pugna entre los partidarios de Moreno y el expresidente Rafael Correa se profundizó luego de que se difundió un audio donde se involucra a Glass –en el cargo desde 2013– y al exauditor general del Estado, Carlos Pólit, en el escándalo internacional de corrupción de la empresa Odebrecht.
Estos audios apuntan a que el representante de la empresa brasileña, José Conceição Santos, se entregó a las autoridades brasileñas para rebajar su condena.
Al ser cuestionado sobre la “tensión política en Ecuador”, el tabasqueño comentó que no hablaron del tema, que sólo tiene la información que conocen los ecuatorianos sobre las diferencias. “Pero estoy seguro de que se van a resolver por la vía del diálogo y de la prudencia. Yo opinó que el presidente Lenin es un hombre honesto y conciliador, también no se debe de olvidar que el expresidente Correa hizo un buen trabajo, ahí están los resultados, en datos, en cifras, se puede comparar con lo que sucedió en los últimos 10 años en otros países. Entonces, no es de buenos y malos, no es maniqueo, es de buscar la conciliación y repito, le tenemos mucha confianza, afecto al presidente Lenin Moreno”.
Al ser cuestionado sobre la Asamblea Constituyente en Venezuela, López Obrador aclaró: “Nosotros no nos metemos en asuntos de otros países. Acabo de hacer referencia a los principios de no intervención y autodeterminación de los pueblos”.
No obstante, deseó que haya diálogo entre las partes, se enfrente el conflicto, que se convenzan de la necesidad de un acuerdo, que no haya violencia. “Pienso, lo dije en Chile, que debe tomarse en consideración la posibilidad de la intervención del Papa Francisco como mediador y buscar el acuerdo entre las partes, no la confrontación, no la violencia, eso es lo que puedo opinar”.
Fuente: Proceso