Un cazador de venados tropezó con más de una docena de campos plantados de mariguana junto con un sofisticado sistema de irrigación en el Condado Polk, de acuerdo a reportes de esa área.
Un total de 13 campos fueron encontrados fuera de Old Highway 35 cerca de Goodrich. Más de 40 mil plantas de mariguana han sido recuperadas hasta ahora, pero de acuerdo a datos obtenidos desde un helicóptero se estima que son más de 100 mil, según dio a conocer hoy el subjefe Bryan Lyons de la Oficina del Sheriff del Condado Polk.
El corresponsal de la policía del Condado Montgomery indicó que equipos de varias agencias de esta área estuvieron allí para sacar las plantas y colocarlas en tráileres. Lyons comentó que un total de 72 oficiales se encuentran en ese lugar.
Internos de la cárcel del Condado Polk también fueron enviados para que trabajaran bajo el candente sol del mes de julio.
Los campos llenos de plantas fueron descubiertos por casualidad, de acuerdo a una entrevista que concedió hoy el subjefe Lyons del Condado Polk.
Un cazador se las encontró este sábado y contactó a la Oficina del Sheriff de ese condado.
Cuando arribaron los oficiales, la evidencia mostró que los encargados del cultivo de los predios acababan de retirarse del lugar.
“Había algunos objetos que nos hicieron pensar que no hacía mucho que se habían ido”, comentó Lyons. “Había un par de campamentos y trataremos de encontrar huellas dactilares para identificar a las personas que estaban allí”.
Inicialmente, las autoridades pensaron que se trataba de nueve campos, pero un helicóptero del Departamento de Seguridad Pública de Texas y una avioneta que fueron desplegadas encontraron otros cuatro predios.
Los productores habían construido un complejo sistema hidráulico para las plantas utilizando bombas de alta calidad para suministrar el agua desde un arroyo cercano, de acuerdo a un reportero de la policía del Condado Montgomery.
Fotografías del lugar de los hechos muestran las plantas ocultas entre un denso bosque. Internos con uniformes a rayas de color negro y blanco están extrayendo las plantas del suelo y colocándolas en tráileres cubiertos con gigantescas lonas de color azul.
Los oficiales sospechan que se trata de personas que no son de esa área.
“Es obvio que no se trata de residentes del Condado Polk — vivían aquí en este lugar, en campamentos muy elaborados”, comentó Lyons.
Autoridades señalaron que con mayor frecuencia están descubrieron más y más casos como éste en Estados Unidos, ya que los narcotraficantes se dieron cuenta que es más fácil cultivar las plantas en el país que tratar de pasarlas por la frontera.
Fuente: The Houston Chronicle