Momentos de tensión se vivieron alrededor de las 6 de la mañana, cuando la vanguardia de la Caravana Migrante tuvo que hacer alto total a 400 metros de distancia de los aproximadamente 200 uniformados que con escudos bloqueaban la carretera federal a Oaxaca, en el kilómetro 33, a la altura del puente conocido como Las Arenas.
Gracias a la mediación de organismos de derechos humanos, los uniformados y la comitiva acordaron que durante el trayecto, los agentes del Instituto Nacional de Migración (INM), pudieran invitar a los participantes de la caminata a través de altavoces a acudir a un albergue, solicitar refugio y obtener todos los beneficios del programa gubernamental.
Los representantes de la Caravana Migrante reiteraron que buscarán reunirse en la Ciudad de México con el presidente Enrique Peña Nieto, el presidente electo Andrés Manuel López Obrador y las cámaras de Diputados y Senadores, para asegurar el libre tránsito de los centroamericanos por el país.
Fuente: Excélsior/ Reforma