La Asamblea de California aprobó el jueves un proyecto que causó gran controversia que requiere que todos los alumnos de las escuelas públicas sean vacunados, lo que despeja uno de los últimos obstáculos legislativos antes de que la medida pase al despacho del gobernador Jerry Brown.
El proyecto se propone aumentar las tasas de vacunación después que un brote de sarampión vinculado al parque de diversiones Disneyland causara el contagio de más de un centenar de personas en Estados Unidos y México en diciembre.
De ser aprobado, impondría en California una de las leyes de vacunación más estrictas sin excepciones para las objeciones personales. Sólo los niños con problemas graves de salud serán exceptuados. Los niños no vacunados deberían recibir la escolarización en sus casas.
“¿Hace falta una crisis generalizada para proteger a los más vulnerables?”, preguntó la asambleísta demócrata Lorena González cuando presentó el proyecto.
La medida fue aprobada por 46-30 después de semanas de manifestaciones de oposición protagonizadas por miles de padres frente al Capitolio. Dos asambleístas republicanas se unieron a la mayoría demócrata en apoyo del proyecto.
El Senado ya aprobó el proyecto una vez, pero todavía deberá aprobar enmiendas antes de enviarlo al gobernador demócrata.
Brown no ha dicho si firmará el proyecto promovido por los senadores demócratas Richard Pan y Ben Allen.
Los oponentes han presentado peticiones para retirar a por lo menos dos senadores que votaron por el proyecto.
El senador demócrata Bill Monning dijo el jueves que él y Pan han sido blanco de esas peticiones. Monning aclaró que su distrito, que incluye Santa Cruz, tiene un número elevado de padres que buscan exenciones de vacunación para sus hijos y señaló que ha tenido que cerrar su oficina distrital por cuestiones de seguridad.
La oposición fue enérgica durante el debate en la asamblea de quienes pretenden evitar la pérdida de la autonomía paterno-materna.
Fuente: AP