Por Dra. Kate Kingsbury* y el Dr. Andrew Chesnut
Los mexicanos le dirán que son 90% católicos pero 100% guadalupanos. Aunque las cifras ya no son del todo exactas, no cabe duda de que la Virgen de Guadalupe ha sido parte constitutiva de la identidad nacional mexicana, lo que se refleja en el hecho de que millones de mujeres y hombres se llaman Guadalupe, muchos de ellos con el apodo de “Lupe”, como una colega de la Universidad de Houston, la Dra. Guadalupe San Miguel, profesora de historia mexicano-americana. Como especialistas en religión vivida, siempre nos ha fascinado la advocación de la Virgen María más importante del planeta, tanto en cobertura territorial como en número de devotos.
Según se dice, la Virgen se apareció por primera vez a un campesino azteca, Juan Diego, en una colina llamada Tepeyac, en la actual Ciudad de México, el 9 de diciembre de 1531, y le dijo al cristiano converso, en su lengua nativa, el nahautl, que quería que se construyera una iglesia en su honor en el lugar de su aparición. Juan Diego buscó al arzobispo de Ciudad de México para comunicarle la noticia de la milagrosa aparición, pero fue recibido con escepticismo. La Virgen, de piel morena, se apareció al campesino azteca por segunda vez y Juan Diego le contó lo que ella ya sabía, que había sido reprendido por el arzobispo. Decidida a que se construyera su iglesia con el nombre de Guadalupe, la Virgen ordenó al azteca de mediana edad que volviera a intentarlo con el prelado más importante de México.
El dudoso obispo pidió una señal de la aparición mariana en el Tepeyac. Durante su tercera aparición, Guadalupe le dijo a Juan Diego que recogiera algunas rosas españolas que habían florecido milagrosamente en su “tilma”, o capa de fibra de cactus. El decidido converso regresó junto al obispo y desplegó su tilma revelando no sólo las intempestivas rosas, sino también una milagrosa imagen de la Virgen impresa en el manto, que hoy puede verse en la Basílica de Nuestra Señora de Guadalupe de Ciudad de México.
La Virgen Morena no sólo es patrona de México, sino también Emperatriz de las Américas, desde Chile hasta Canadá. Mientras que otras manifestaciones de María reclaman como mucho una región o un país, Guadalupe es la única que reina sobre dos continentes, Norteamérica y Sudamérica. Y por si fuera poco, durante un breve periodo a mediados del siglo XX también fue declarada patrona de Filipinas, donde reside la tercera población católica más numerosa del mundo. En vísperas de su festividad, el 12 de diciembre, hemos querido compartir 15 datos fascinantes sobre la Virgen que condujo a los mexicanos a la independencia de España.
1 Muchos mexicanos no saben que la Guadalupe original es de Extremadura, España. De hecho, Cristóbal Colón era un devoto e incluso nombró a la isla caribeña de Guadalupe en su honor, después de que supuestamente salvó a su flota de una tormenta en el mar. La Guadalupe española es una de las varias Madonas negras europeas, por lo que en su encarnación mexicana se hizo más clara como Virgen Morena.
2 Antes de la supuesta aparición de Guadalupe al campesino indígena San Juan Diego en 1531, la diosa azteca Tonantzin había sido venerada durante décadas en el mismo lugar, el Tepeyac, que hoy alberga la Basílica de Ciudad de México. Tonantzin significa “Nuestra Madre” en la lengua azteca de Nahautl, por lo que algunos escépticos sostienen que la Iglesia colonial española inventó la historia de la aparición de Guadalupe a Juan Diego para convertir al cristianismo a sus compatriotas aztecas y a otros grupos indígenas.
3 A pesar de su controvertida canonización en 2002, no existen pruebas históricas fehacientes de que San Juan Diego existiera realmente. De hecho, en el momento del polémico proceso de canonización, el abad de la Basílica, Guillermo Schulenberg, dimitió en 1996 afirmando que Juan Diego nunca había existido y que “es sólo un símbolo”. El campesino azteca fue canonizado, no obstante, como parte de una estrategia del Vaticano para retener a los católicos indígenas de México y de toda América Latina que han desertado en masa hacia el protestantismo, especialmente el pentecostalismo.
4 Los historiadores del arte que han estudiado las representaciones de la Matrona de México a lo largo de los siglos han descubierto que, con el paso del tiempo, el color de su piel se ha ido oscureciendo progresivamente, pasando de un tono marrón más claro a otro más oscuro. Los estudios sobre su evolución histórica, como Nuestra Señora de Guadalupe, del historiador Stafford Poole, demuestran que, contrariamente a la leyenda, fueron los criollos mexicanos (descendientes de españoles nacidos en el México colonial), y no los indígenas conversos, los primeros devotos de Guadalupe y los principales propagadores de su culto. Las representaciones artísticas de Guadalupe se oscurecieron notablemente tras la Revolución Mexicana (1910-20), que llevó a la exaltación del mestizo como nuevo modelo de mexicanidad5.
5 Aunque su devoción creció durante la época colonial española, fue la independencia de España, declarada en 1810, la que realmente la transformó en la matrona nacional que es hoy. El líder independentista, el cura Miguel Hidalgo, lanzó la campaña por la independencia con el grito de guerra “¡Mueran los españoles y viva la Virgen de Guadalupe!”. La imagen de la Virgen mexicana blasonada en banderas, estandartes y sombreros campesinos se convirtió en la insignia de la rebelión armada contra el dominio español. Las tropas españolas, por su parte, estaban dirigidas por la Virgen de los Remedios, que fue la advocación preeminente de María en México hasta que fue eclipsada por Guadalupe.
6 Aparte de su tez cada vez más oscura, La Morena permaneció relativamente inalterada en las representaciones artísticas hasta la década de 1980. Y los primeros artistas que experimentaron con representaciones novedosas de la Emperatriz de las Américas fueron mexicano-americanos que no se sentían tan limitados cultural y religiosamente como sus homólogos mexicanos a la hora de explorar nuevas formas de representarla utilizando todo tipo de medios. Una Guadalupe con los pechos desnudos creada por la artista Paz Winshtein fue objeto de considerable controversia cuando se expuso en una galería de Santa Fe (Nuevo México) en 2014.
7 La etimología de su nombre también es objeto de debate. Algunos lingüistas e historiadores apuntan a orígenes náhuatl, mientras que otros, más convincentes, nos recuerdan que el nombre Guadalupe ya existía en España, por lo que debemos buscar allí su génesis etimológica. No cabe duda de que el prefijo “Guada” deriva del árabe “wadi” o valle fluvial. Sin embargo, el jurado sigue sin pronunciarse sobre “lupe”, que muchos afirman que procede del español “lobo” (lupus en latín).
8 Guadalupe fue parte integrante de la primera gran rebelión popular del siglo XX, la Revolución Mexicana (1910-20). Luchando bajo el lema “tierra y libertad”, el líder revolucionario campesino Emiliano Zapata y sus combatientes llevaron a la Mestiza María en estandartes a la batalla contra los oligarcas mexicanos. Algunos guerrilleros zapatistas mantuvieron la tradición durante su levantamiento en 1994 en el sureño estado de Chiapas.
9 En 1929, el fotógrafo oficial de la antigua Basílica afirmó haber descubierto la imagen de un hombre barbudo en el ojo derecho de la imagen original de Guadalupe. Dos décadas más tarde, otro “experto” no sólo confirmó la presencia del hombre barbado original, sino que afirmó verlo en sus dos ojos. Desde entonces, el “secreto de sus ojos” se ha ampliado para incluir imágenes de una familia entera supuestamente visibles en sus dos pupilas. Para los creyentes, las imágenes son reflejos de lo que Guadalupe vio cuando se apareció hace casi cinco siglos a San Juan Diego.
10 Se dice que la imagen original de la Virgen es indestructible. En primer lugar, la fibra de agave sobre la que está impresa la imagen no se ha deteriorado con el tiempo, a diferencia de otras telas similares a la tilma. La mayoría de las pinturas sobre este tipo de materiales no duran más de diez años, ya que los hilos empiezan a romperse y deteriorarse. Además, la radiación infrarroja y ultravioleta de las decenas de miles de velas no parece haber afectado a la durabilidad de la tilma.
En segundo lugar, la Virgen mexicana ha sobrevivido a un derrame de ácido acre, así como a la explosión de una bomba. En 1785, un trabajador que limpiaba el cristal donde se encontraba la Virgen, derramó imprudentemente un 50% de disolvente de ácido nítrico sobre la imagen, que debería haberse destruido instantáneamente. Sin embargo, se dice que en los 30 días siguientes la imagen se restauró milagrosamente. Guadalupe también sobrevivió a la explosión de una bomba en 1921. Un activista anticlerical detonó en el interior de la basílica una bomba consistente en 29 cartuchos de dinamita. Estos estallaron inmediatamente delante de la imagen de Guadalupe. La explosión aniquiló todo, desde la barandilla de mármol del altar hasta el suelo bajo la imagen. Las ventanas a 150 metros de distancia se hicieron añicos. Sin embargo, la imagen permaneció intacta.
11 En continuidad con su fuerte presencia en el cuerpo político mexicano, el partido político gobernante lleva el nombre de Guadalupe. En 2012, el actual presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador (alias AMLO), fundó el Movimiento Regeneración Nacional, un partido político de la izquierda populista cuyas siglas, MORENA, recuerdan a la Virgen Morena.
12 Para consternación de la Iglesia mexicana, la imagen de Guadalupe se ha fusionado con la de su rival religiosa, la Santa Muerte. La imagen híbrida, conocida como GuadaMuerte, integra elementos de las dos figuras femeninas más populares del panorama religioso mexicano y también ha sido reprendida por varios líderes devocionales de la Santa Muerte que no están dispuestos a provocar a la Iglesia en un país que sigue siendo católico en un 78%.
13 La Virgen viste una tilma azul zafiro que representa el cielo nocturno. Lo intrigante de las estrellas de su manto es que tienen significados polisémicos y sincréticos, al tiempo que reflejan información astrológica. Los cuerpos astrales no sólo representan sus orígenes celestiales según la teología cristiana, sino que también evocan elementos que se encuentran en el centro de la cosmogonía azteca. Los aztecas observaban los cuerpos celestes y seguían los movimientos del sol, la luna y las estrellas. Sus creencias religiosas estaban íntimamente ligadas a los movimientos estelares. Según las investigaciones realizadas en los años ochenta por el P. Mario Rojas Sánchez y el Dr. Juan Homero Hernández Illescas, de México, las estrellas del manto de Guadalupe se corresponden exactamente con la posición de las estrellas en el solsticio de invierno de la mañana del 12 de diciembre de 1531, cuando se dice que Juan Diego tuvo su última visión de la Virgen. Para los aztecas, el conocimiento directo de la posición de las estrellas habría sido esencial como forma de registrar el tiempo.
14 En las sociedades indígenas de América, la ropa y los adornos se han utilizado durante mucho tiempo para comunicar el estatus social e información sobre el portador. Así, las prendas que lleva la Virgen mexicana transmiten mensajes específicos utilizando símbolos indígenas que habrían indicado a los pueblos aztecas sus orígenes y su condición física. La cinta negra que lleva la advocación mariana y su pelo suelto son los más importantes. Una cinta negra atada justo por encima de la cintura era la forma en que las nobles indígenas comunicaban que estaban embarazadas. Sin embargo, el pelo suelto significaba que eran vírgenes. En la imagen de La Morena, la inusual combinación de cinta negra y mechones sueltos se utiliza para significar que Guadalupe no sólo es la más noble de todas las mujeres debido a sus orígenes celestiales, sino también, como afirmó a Juan Diego cuando se encontraron en lo alto de la colina, que es la “Santa Virgen María, Madre del Dios verdadero”.
15 Muchos han interpretado las manos de la Virgen como una llamada a la unidad. Simbólicamente, se dice que las manos de la Morena unidas en oración no sólo confirman su petición de que el obispo construyera una capilla para que la gente rezara en el cerro del Tepeyac, donde ella apareció, sino que también se cree que indican su deseo de que las culturas indígena y española se unan para dar origen a una nueva raza. Esta afirmación se basa en que se dice que su mano derecha es más clara y descansa sobre una mano más llena y oscura, lo que indica que la presencia española se funde con la de los pueblos indígenas.
16 En todo México se erigen santuarios a la Virgen Mestiza para evitar la basura y el vertido ilegal de residuos. En el barrio de Moctezuma, en Chilpancingo (Guerrero), los vecinos instalaron un altar callejero con una pancarta en la que se leía: “Acepto ofrendas, no basura”.
17 El empresario mexicano Wu You Lin, de ascendencia china, provocó un escándalo en 2002 al registrar como marca la imagen de la Virgen de Guadalupe. La marca le otorgaba derechos exclusivos para utilizar la imagen con fines comerciales. Su marca registrada en el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial expiró oficialmente en febrero de 2012.
18 La Archidiócesis de México compartió recientemente la primera fotografía jamás tomada de la imagen original de Nuestra Señora de Guadalupe, que apareció en la tilma de San Juan Diego en 1531. En un post en Facebook el mes pasado, la arquidiócesis dijo que “en la tarde del 18 de mayo de 1923, el fotógrafo Manuel Ramos tuvo el honor de ser el primero en fotografiar la imagen de la Virgen de Guadalupe directamente del ayate (poncho) de Juan Diego sin el vidrio protector.”
19 A pesar de su imaginería pacífica, la Virgen de Guadalupe ha sido frecuentemente utilizada por los mexicanos como símbolo de insurgencia. Durante la revolución mexicana int. Durante la Guerra de Independencia de México contra España, Emiliano Zapata, el principal líder de la revolución popular, hizo que sus rebeldes llevaran un estandarte con la imagen de la Virgen de Guadalupe cuando entraron en Ciudad de México en 1914. Zapata y sus seguidores veían en la Virgen un símbolo de su lucha por la justicia contra los españoles y su deseo de recuperar su tierra. Existe una larga tradición de pasear el estandarte de Guadalupe en procesiones militares por Ciudad de México. Durante la Guerra Cristera en México, entre 1926 y 1929, los estandartes de los rebeldes también contenían su imagen.
20 Algunos pueblos indígenas asocian a la Virgen de Guadalupe con el pulque, que le ofrecen como ofrenda en su fiesta del 12 de diciembre. El pulque es una bebida alcohólica láctea prehispánica elaborada a partir de la savia ligeramente fermentada de la planta del agave, también utilizada para elaborar tequila y mezcal. En la época prehispánica, entre algunos pueblos indígenas constituía una libación reservada únicamente a diosas, dioses y sacerdotes. En la actualidad, ciertos grupos indígenas identifican la bebida con la leche de la Virgen, que es vista como una figura materna sustituta, como ocurre entre la comunidad matlazinca de San Juan Atzingo, en el Valle de Toluca, según señala el antropólogo John Bushnell.
*La Dra. Kate Kingsbury obtuvo su doctorado en antropología en la Universidad de Oxford, donde también realizó su Mphil. La Dra. Kingsbury es políglota y habla con fluidez inglés, francés y español. La Dra. Kingsbury es investigadora asociada en la Universidad de Columbia Británica (Canadá). Su trabajo se centra en la divinidad femenina y las seguidoras de la Santa Muerte. La Dra. Kingsbury cree firmemente en la igualdad de derechos y en el poder de la educación para mejorar las desigualdades mundiales. También trabaja gratuitamente para una organización sin ánimo de lucro cuyo objetivo es capacitar y educar a las niñas de Uganda.
Fuente; The Global Catholic Riview
(Traducción realizada con la versión del traductor www.DeepL.com/Translator)
