Los socorristas alcanzaron el domingo la cumbre de un volcán que aún registraba erupciones en el centro de Japón e hicieron un hallazgo macabro: 31 muertos, varios bajo una gruesa capa de ceniza.
Cuatro de las víctimas fueron bajadas y su muerte quedó confirmada un día después de la gran erupción inicial en el monte Ontake, declaró Takehiko Furukoshi, funcionario de gestión de crisis en la prefectura de Nagano.
De las 27 víctimas restantes se dijo que presentaban falla cardiaca y pulmonar, expresión con la que las autoridades japonesas describen un cadáver hasta que lo examinan los médicos policiales.
Las autoridades no facilitaron detalles ni precisaron las causas probables del fallecimiento de esas personas.
La erupción es la primera que causa numerosos muertos en los tiempos modernos en el volcán al que se conoce como el monte Ontake, de 3 mil 067 metros (10 mil 062 pies) de altura.
El lugar es un popular destino para montañistas unos 210 kilómetros (130 millas) al oeste de Tokio, en Honshu, la principal isla de Japón.
Una erupción similar ocurrió en 1979 en el volcán sin que hubiera víctimas fatales.
Helicópteros de rescate volaban sobre los albergues y vastas zonas cubiertas de ceniza en la montaña; todo era gris fantasmal, como la superficie de la luna, carente de color, salvo el naranja brillante que los socorristas usaban en sus trajes.
Según la prensa japonesa, algunos de los cadáveres fueron encontrados en un albergue cerca de la cumbre y otros sepultados bajo una capa de 50 centímetros (20 pulgadas) de ceniza.
La policía dijo que se ha identificado a sólo dos de los cuatro muertos que han confirmado las autoridades. Ambos son hombres, uno de 23 y otro de 45 años.
El monte Ontake hizo erupción el sábado poco antes del mediodía, quizá en el peor momento posible, cuando al menos 250 personas aprovechaban un bello sábado de otoño para una excursión de ascenso.
El volcán expulsó en medio de un enorme estruendo grandes columnas blancas de gas y ceniza que se elevaron hacia el cielo. Después debido a la erupción se oscureció el sol del mediodía y la zona circundante quedó cubierta de ceniza.
Inicialmente centenares de personas quedaron atrapadas en las cuestas, aunque la mayoría habían logrado el descenso para el sábado en la noche.
Unas 40 personas que quedaron varadas durante la noche bajaron el domingo. Muchas estaban lesionadas y algunas fueron rescatadas por los helicópteros o bajadas en camillas.
Para el anochecer, se había bajado a todos los heridos, dijeron las autoridades.
La Agencia contra Incendios y Desastres de Japón informó de 37 personas heridas y dijo que intentaba actualizar su cifra de desaparecidos.
Fuente: AP