Por
La crítica del presidente Andrés Manuel López Obrador a la “derechización” de la UNAM tiene el propósito de sacudir a su comunidad para hacerla, otra vez, partícipe en la discusión de los grandes temas nacionales y también arena política para la sucesión presidencial de 2024, eventualmente con Claudia Sheinbaum, líder del Consejo Estudiantil Universitario (CEU) que este domingo cumplió 35 años del convertirse el primer movimiento juvenil antineoliberal.
Decir que el Presidente de México “polariza” y “ataca” a la UNAM es un análisis muy superficial, porque por más que quiera intervenir en el nombramiento del rector que sucederá a Enrique Graue, en 2023, esa decisión corresponde a 15 miembros de la Junta de Gobierno, que tienen la prerrogativa exclusiva de designar a todos los directores de facultades, escuelas e institutos.
El más reciente integrante de este organismo cúpula de la UNAM, emblema de la histórica antidemocracia, es Enrique Cabrero, director del Conacyt en el gobierno de Enrique Peña Nieto, impulsado por el grupo de José Narro Robles, personaje clave en la vida interna de la institución desde Carlos Salinas.
Salvo información en contrario, López Obrador y su gobierno no influyeron para que Cabrero, exdirector del CIDE en los gobiernos de Vicente Fox y Felipe Calderón, fuera integrado a la Junta de Gobierno, cuyos integrantes son designados por el Consejo Universitario, otra anacrónica estructura de la UNAM.
El reiterado señalamiento de López Obrador sobre la derechización de la UNAM obedece quizá a la incorporación de Cabrero a la Junta de Gobierno, apenas el 8 de septiembre, o a quienes conforman ese organismo o hasta la decisión de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales (FCPyS) de excluirlo de los festejos de su 70 aniversario, en mayo.
López Obrador, el primer presidente egresado de esa facultad, no fue invitado o no quiso ir, pero como fue incluida la escritora Ángeles Mastretta y José Woldenberg, esposa y amigo de Héctor Aguilar Camín, los tres firmantes del desplegado que aconsejó formar la coalición PRI-PAN-PRD.
Esta conducta de los directivos de la FCPyS contrastó con la simpatía por Ricardo Anaya, el candidato presidencial de PAN-PRD-MC en 2018, quien fue invitado a impartir el Diplomado Política Mexicana Contemporánea, junto con miembros de su equipo de campaña y Rolando Cordera, autor junto con Carlos Tello de México, la batalla por la nación, libro que alertó y acreditó la instauración del neoliberalismo en México y en la propia UNAM.
Uno de los primeros efectos del modelo neoliberal, como lo advirtió ese libro, fue generar condiciones en las universidades públicas para cobrar la educación, como lo hizo el rector Jorge Carpizo, en 1985, y que detonó el CEU, surgido el 31 de octubre de 1986.
Y ahí apareció Sheinbaum como líder estudiantil y también el actual consejero presidente del INE, Lorenzo Córdova —discípulo de Wolbenberg—, dos presidenciables en 2024 por los dos proyectos que se disputan la nación…
POR ÁLVARO DELGADO
DIRECTOR DE INVESTIGACIÓN EN EL DIARIO DIGITAL “SIN EMBARGO”
PERIODISTA.ALVARO.DELGADO@GMAIL.COM
@ALVARO_DELGADO