Los agregados laborales que el gobierno de Estados Unidos destinará a su embajada en México “no serán inspectores de temas de trabajo y cumplirán con todas las leyes mexicanas relevantes”, aseguró este lunes Robert Lighthizer, representante comercial estadounidense, en una carta dirigida al subsecretario mexicano Jesús Seade.
Las verificaciones sobre el cumplimiento de la legislación laboral en México y el derecho a la sindicalización de los trabajadores, condiciones que forman parte del protocolo de puesta en práctica del Tratado México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), “serán realizadas por panelistas independientes, no por los agregados laborales”, expresó en la carta el funcionario estadounidense, poco después de reunirse en Washington con el subsecretario Seade.
El sábado pasado, Seade envió una carta a Lighthizer, en la que criticó la decisión del gobierno estadounidense de nombrar agregados laborales para supervisar el cumplimiento de la ley del trabajo en México, una condición que fue incluída por Washington en el documento que envió a su Congreso para la aprobación del T-MEC.
El T-MEC “es un gran acuerdo para Estados Unidos y México. Espero con interés trabajar con usted y sus colegas para garantizar que el acuerdo entre en vigor lo antes posible”, añadió el representante comercial estadounidense.
En la carta, el funcionario estadounidense señala que en las embajadas de Estados Unidos en las principales capitales extranjeras, incluida la de México, están destacados agregados de más de una docena de agencias federales, incluido el personal de los departamentos de Agricultura, Comercio, Defensa, Tesorería y Justicia.
Estas personas, añade en la carta, brindan experiencia técnica para apoyar la misión diplomática de Estados Unidos en México.
El gobierno de Estados Unidos ha destinado personal en varias embajadas de todo el mundo, incluso en México, para ayudar a los gobiernos extranjeros a mejorar las condiciones de trabajo.
“México, a su vez, tiene muchos agregados estacionados en los Estados Unidos desde la Secretaría del Interior de México, la Secretaría de Defensa Nacional, la Secretaría de Seguridad y Protección Civil, la Oficina del Fiscal General, el Centro Nacional de Inteligencia, la Secretaría de Economía, la Secretaría de Agricultura y Desarrollo rural, el Servicio de Administración Tributaria y la Unidad de Inteligencia Financiera”, agrega.
El gobierno estadounidense, apunta, ncluyó lenguaje en la legislación de implementación de USMCA que autoriza a hasta cinco agregados del Departamento de Trabajo para trabajar con sus contrapartes mexicanas, trabajadores y grupos de la sociedad civil en la implementación de la reforma laboral mexicana, “incluso proporcionando asistencia técnica y desembolsando fondos para el desarrollo de capacidades y brindar asistencia al nuevo comité laboral interagencial del gobierno de Estados Unidos”.
Fuente: La Jornada