Sindicatos le meten presión al Senado

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Integrantes de sindicatos adheridos al Congreso del Trabajo entregaron un documento, firmado por más de 40 organizaciones, en su mayoría del Estado de México y ligados al PRI, a legisladores en el cual rechazan la reforma laboral que actualmente se debate en el Senado de la República

Ciudad de México.- Tras cuatro horas de plantón afuera del Senado, integrantes de sindicatos adheridos al Congreso del Trabajo se retiraron luego de entregar un documento a los legisladores donde rechazan la reforma laboral.

Los sindicalistas en su mayoría ligados al PRI del Estado de México, tierra del Presidente electo, Enrique Peña Nieto, llegaron está mañana a las afueras del Senado para hacer presencia mientras al interior del recinto se llevaba a cabo una reunión con el Presidente de la Comisión de Trabajo y Previsión social, Ernesto Gándara, y con el coordinador de los senadores del PRI, Emilio Gamboa.
El senador y secretario de Finanzas de la CTM, Armando Neyra, fue quien organizó el encuentro en donde dejó clara la fuerza que tiene los 1.8 millones trabajadores del Edomex y propuso parar las 628 fábricas para preguntarle a los trabajadores si quieren la reforma laboral.

El senador priista criticó que el PAN y el PRD busquen concretar una alianza para trastocar la autonomía sindical con el tema de transparencia y rendición de cuentas y advirtió que están echando gasolina al fuego.

En la reunión estuvieron presentes líderes de la Confederación Regional Obrera (CROM), de la CROC y de la Confederación de Obreros, Campesinos y Empleados del Estado de México (COCEM).

Óscar Moreno, líder de la CTC, indicó que en el documento firmado por más de 40 organizaciones, en su mayoría del Estado de México, mostraron su preocupación a los senadores de aprobar la reforma laboral enviada por el Ejecutivo federal.

“Se les expuso que no podemos permitir una ley hecha por capricho de empresarios y panistas, se les expuso que no venderemos a la clase trabajadora y que llegaremos a una huelga nacional de ser necesario”, dijo ante cientos de sindicalizados reunidos en la parte posterior del Senado.

Rodolfo González, dirigente de la CROM, indicó que la reforma laboral que se discute en el Senado afecta de manera directa las jubilaciones y pensiones de la base trabajadora del País.

“Se les expuso a los senadores que estamos abiertos a un diálogo franco, pero con la condición de no afectar al movimiento obrero, a la autonomía sindical y a los procedimientos internos de los gremios, se les dejó en claro que no se deben entrometer en la vida interna de cualquier sindicato”, advirtió.

Roberto Monroy, líder de la CROC, dijo a los trabajadores convocados a esta protesta que deben estar pendientes ante las futuras movilizaciones sindicales e incluso a un paro nacional.

“Tengan confianza de que la reforma laboral no pasará, no nos van a engañar con la reforma que afecta nuestro intereses, pero estemos pendientes, no nos cansemos”, exhortó Omar Velázquez, quien encabeza el SUTEYM.

En su discurso dijo que la reforma laboral abre camino a la desigualdad y a la pobreza de los trabajadores.

“Estamos hartos de la inoperancia del Estado y que por ello se eche culpa a los sindicatos, sabemos vivir nuestra autonomía como sindicatos y nadie debe transgredir nuestra vida interna, esa reforma laboral abre camino a la desintegración de los sindicatos y a los trabajadores nos hará más pobres”, explicó.

La manifestación estuvo amenizada por tambores, matracas y porras, y no afectó el ingreso de los senadores, ni del personal administrativo a la Cámara alta.

Los líderes llamaron a los inconformes a regresar a sus centros de trabajo y acudir a las asambleas en donde se proyectarán nuevas movilizaciones para la próxima semana.

Autoridades que custodian el Senado mantienen cercado los accesos a este recinto legislativo, por las calles de Madrid, París, Reforma, Antonio Caso e Insurgentes, esto debido a que esperan manifestaciones más radicales durante el resto del día.

Fuente: Reforma

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