Pese a que el fin de semana le retiró de sus derechos de ministro religioso, la Arquidiócesis de Los Ángeles afirmó este domingo que continúa en su cargo el cardenal Roger Mahony, arzobispo emérito de la ciudad, pese a que el viernes pasado el arzobispo local anunció su destitución a causa de los escándalos de pederastia.
“El cardenal Mahony como arzobispo emérito sigue siendo obispo con facultades en la Arquidiócesis de Los Ángeles”, informó este domingo el arzobispo José Gómez, el mismo que el viernes había anunciado la separación de Mahony de la iglesia católica angelina.
Tras señalar en un comunicado que la prensa y los feligreses solicitaron aclaraciones sobre la situación de Mahony, Gómez aseguró que el arzobispo emérito cuenta “con plenos derechos para celebrar los sacramentos de la Iglesia y servir a los fieles sin restricción”.
La declaración de este domingo tornó confuso el caso de los sacerdotes involucrados en casos de pederastia en Los Ángeles.
El arzobispo Gómez había anunciado la salida de Mahony luego que el jueves una jueza de la Corte Superior de Los Ángeles ordenó hacer públicas las más de 30 mil páginas de expedientes de 122 sacerdotes acusados de abuso sexual a menores.
En los reportes se identificó que la actuación de Mahony estuvo marcada por décadas por la protección y por evitar que salieran a la luz pública acciones reprobables de los sacerdotes de la Iglesia católica.
Muchos de los sacerdotes en lugar de ser sancionados sólo eran transferidos a otras parroquias, en donde continuaron con sus actos de abuso y acoso sexual a menores.
“Encuentro en estos expedientes una lectura brutal y dolorosa”, escribió Gómez, un obispo mexicano que sustituyo a Mahony en 2011 en la arquidiócesis de Los Ángeles y quien describió los reportes del caso como “terriblemente tristes y endemoniados”.
La acción en contra de Mahony, de acuerdo con expertos y por ser uno de los hombres más poderosos de la Iglesia católica en este país, no tendía paralelo.
En 2011, Mahony dejó su cargo en la arquidiócesis de Los Ángeles al cumplir 75 años de edad como establecen las leyes canónicas, pero se le mantuvo con otras actividades dentro de la iglesia desde una parroquia en North Hollywood.
En 2007, en un acuerdo extrajudicial con más de 500 víctimas de padres pederastas, la Iglesia Católica indemnizó con 660 millones de dólares por los abusos cometidos, pero muchas de las acusaciones habían quedado ocultas.
La misma iglesia se había aferrado de manera infructuosa a mantener en secreto los expedientes y acusaciones, así como los nombres de altos jerarcas aduciendo que se denigraría la labor de la Iglesia católica.
Fuente: Notimex