Aunque la Secretaría de Gobernación todavía no defina los nuevos estándares de cooperación en materia de seguridad con los Estados Unidos, el Gobierno de Barack Obama sigue buscando destinar recursos a México para combatir el narcotráfico, la violencia y el acceso a la justicia.
El Departamento de Estado solicitó al Congreso 121 millones de dólares para asistir a México durante el año fiscal 2015 en la Iniciativa Mérida.
Sin embargo, los recursos son menores a lo que ha se destinado en el pasado: durante el año fiscal 2012 se otorgaron 248 millones de dólares, 199 millones en 2013 y para 2014 fueron 148.
En su proyecto de presupuesto para el año fiscal 2015, el Departamento de Estado pide al Congreso aprobar 35 millones de dólares bajo el rubro “fondo de apoyo económico” para extender la cooperación con México en la Iniciativa Mérida.
A través de este fondo, indica el documento, Estados Unidos pretende enfocarse en el fortalecimiento y en la construcción de las reformas para mejorar el Estado de Derecho y el respeto a los derechos humanos en México, así como para construir comunidades fuertes capaces de prevenir y reducir el crimen y la violencia.
“Un México más estable aumentará la seguridad nacional de los Estados Unidos, promoverá el potencial de crecimiento y protegerá a los ciudadanos estadounidenses a lo largo de nuestra frontera compartida”, indica el texto.
Asimismo, el Departamento de Estado solicitó 80 millones de dólares para asistir a México bajo el rubro de “control internacional de narcóticos y cumplimiento de la ley”, mismo que se destina para ayudar a combatir el crimen transnacional en aquellos países cuyas instituciones de seguridad ciudadana son todavía débiles.
El documento señala que los programas en esta materia se centrarán en desarrollar instituciones de Estado de Derecho a través de entrenamiento, asistencia técnica y compra limitada de equipo, y los programas continuarán proveyendo asistencia a las instituciones de justicia federales y estatales.
Además, el Departamento de Estado solicitó 1.5 millones de dólares para apoyar a México en educación y entrenamiento militar, es decir, programas para elementos de las fuerzas armadas, regularmente realizados en EU, enfocados en la profesionalización y en la institucionalización del respeto por los derechos humanos y el Estado de Derecho.
Finalmente, la dependencia que encabeza John Kerry solicitó 5 millones de dólares para asistir a México en materia de financiamiento a fuerzas militares en el extranjero para promover la cooperación con los Estados Unidos.
Refuerzo a la seguridad fronteriza
El presidente estadounidense Barack Obama presentó ayer su proyecto presupuestario para el año fiscal 2015, que incluye 12 mil 764 millones de dólares (mdd) en seguridad fronteriza.
El presupuesto solicitado asciende a 3.9 mil millones de dólares que apuestan por una modesta reducción de los presupuestos de defensa y el reforzamiento de la seguridad fronteriza con México.
Para el Departamento de Seguridad Fronteriza (DHS), Obama solicitó un presupuesto de 60 mil 900 mdd.
A esta partida habría que sumar 35 mdd del denominado Fondo de Apoyo Económico (ESF) en programas y reformas en materia de derechos humanos y la prevención del crimen y la violencia.
La propuesta presupuestaria para la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) de 12 mil 764 mdd representa un aumento de 4.3% en relación con el presupuesto asignado de 12 mil 445 mdd en el año fiscal 2014.
Por lo que toca a la seguridad de la frontera con México, el presupuesto del Departamento de Seguridad Interna (DHS) contempla una inversión adicional por 362 millones de dólares para reforzar la infraestructura fronteriza.
En el área de defensa, Obama contempla una erogación por un total de 496 mil millones de dólares, una cifra ligeramente inferior al presupuesto del 2014 que superó los 526 mil millones de dólares.
El líder de la mayoría republicana en la Cámara Baja, John Boehner, consideró el plan presupuestal como el “más irresponsable” desde que llegó Obama a la presidencia y advirtió que lo combatirán para evitar que se convierta “en un lastre para la economía y la creación de empleo”.
Fuente: Reforma y agencias