Rapero español a prisión por cantar “El Rey Borbón es un ladrón”

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“Me están utilizando de cabeza de turco para asustar al resto y tratar de impedir, con el terror, que la gente se exprese libremente y muestre su rabia y su descontento”. La Audiencia Nacional ha ordenado el ingreso en prisión del rapero de Podemos Pablo Hasel para que cumpla la condena de nueve meses de cárcel que le fue impuesta como autor de los delitos de enaltecimiento del terrorismo, e injurias y calumnias a la monarquía y a las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, por difundir mensajes atentatorios en redes sociales

El rapero Pablo Rivadulla, conocido artísticamente como Pablo Hasél, entrará en prisión dentro de siete días. El Tribunal Supremo le ha condenado a nueve meses de prisión, que pueden verse aumentados por otros procesos judiciales abiertos. En este caso, será por injurias a la Corona, a las Fuerzas de Seguridad del Estado y enaltecimiento del terrorismo, debido al contenido de sus letras y a algunos de sus pronunciamientos en redes sociales. Hasél ya anunciado dos cosas: que no se presentará voluntariamente y que esta condena no servirá para cambiar su discurso.

Recibió, hace pocos días, la notificación de su entrada inminente en prisión. ¿Lo esperaba?

Sí, me lo esperaba desde hacía años. No me sorprende nada, soy consciente del tipo de estado en el que vivimos, que no hay libertad de expresión. Mi caso es un ejemplo más que lo corrobora en la práctica, y, precisamente por ser consciente del estado en el que vivimos, hago lo que hago: para conquistar otro tipo de estado.

No es la primera persona juzgada por el contenido de sus letras o afirmaciones en redes, pero sí la primera en Europa que irá a prisión. ¿Cree que se trata de una sentencia ejemplarizante?

Sí, totalmente. Es una sentencia para asustar al resto. Llevan muchos años acosándome con todo tipo de represión, no solo con condenas, y no me han doblegado. Saben que no voy a claudicar por estar encarcelado. Me están utilizando de cabeza de turco para asustar al resto y tratar de impedir con el terror que la gente se pueda expresar libremente, que muestre su rabia y su descontento ante una situación en la que cada vez más personas están condenadas a la miseria.

Ya ha avisado de que no va a dejar de hablar de estos temas.

No. A mí desde que me detienen en 2011 y hacen un registro en mi domicilio por hacer canciones, todo eso me reafirmó más, me ha fortalecido, y me ha dado más motivos para saber que no quiero vivir en un estado en el que, por contar hasta hechos probados sobre la monarquía o sobre la policía, te encarcelen. Me niego a aceptar esta barbaridad y quedarme de brazos cruzados.

Este seguimiento se remonta a 2011, cuando le investigan por el tema Muerte a los Borbones, una canción que sigue en YouTube. ¿Cómo ha vivido estos años bajo la lupa?

En 2011 me imputaron por 20 canciones, esa era una. La represión va más allá de las condenas. Llevo mucho tiempo sin poder tener cuenta en el banco, ni puedo tener nada, porque estoy embargado desde hace muchos años. Tengo una dificultad añadida para encontrar trabajo, he sufrido numerosos registros en estaciones cuando me he desplazado para dar conciertos, me han hecho saber, desde 2011, que tengo el móvil pinchado, han acosado a mi entorno más cercano. Lo resumiría diciendo que ha sido un acoso constante con la intención de doblegarme. Como no lo han conseguido, este encarcelamiento es una venganza.

No va a presentarse voluntariamente el día que tenga que entrar en prisión. ¿Un último acto de resistencia?

Sí, sería una humillación el hecho de que yo me presentara en prisión y llamara a la puerta para que me encarcelen. Ante una sentencia tan injusta, a nada que haya un mínimo de dignidad uno se niega a entregarse a los carceleros.

https://twitter.com/ChalecosAmarill/status/1354785541095620618

Su condena ha despertado reacciones de todo tipo. Afirmó que, de estar el PP en el Gobierno, el apoyo habría sido mayor. ¿Echa de menos más solidaridad por parte de ciertos sectores de la izquierda?

Sí. De hecho, ya he tenido más apoyo de ciertos sectores cuando estaba el PP en el Gobierno, y lo achacaban todo a que estaba el PP en el Gobierno y que estábamos yendo hacia una deriva franquista por eso. Resulta que, ahora, vemos como no ha habido cambios al respecto, y resulta que ya no se escandaliza tanta gente ni señala al Gobierno como culpable. No esperaba absolutamente nada de este Gobierno porque, entre otras cosas, prometieron derogar la ley mordaza, y no solo no lo han hecho, sino que han aprobado la conocida como ley mordaza digital, que la amplía más. Así con otras leyes represivas y otras promesas electorales que han terminado siendo humo. Sí que me ha parecido decepcionante, y esperaba algo más del mundo artístico, por una cuestión de compañerismo. Hay miedo, porque se cierran muchas puertas al mojarse con según que cosas, pero si no somos conscientes de que es un ataque a nuestras libertades fundamentales, y no una cosa que solo me afecta a mí, van a continuar recortando más y más libertades, como ya hemos ido viendo en los últimos años.

Ha tenido, no obstante, bastantes muestras de apoyo. También ha habido críticas hacia ciertas partes de su discurso, sobre todo por sus declaraciones sobre ETA y los Grapo. ¿Se arrepiente de haber dicho según qué cosas?

No me arrepiento en absoluto. Nunca he apoyado ninguna acción contra inocentes. En el caso concreto de ETA, discrepo ideológicamente en muchas cosas, también en muchas formas de actuar, pero en otras lo he apoyado y no me arrepiento. Sigo diciendo que, ante la violencia del Estado, todos los métodos de lucha son legítimos como autodefensa. A mí va a venir a secuestrarme para encarcelarme un cuerpo armado. ¿Eso no es violencia? ¿No es violencia que nos nieguen derechos fundamentales como un trabajo digno, como una vivienda en condiciones, que estén enviando al paro y a la miseria a un montón de personas, o que haya ancianos con pensiones que no les permiten vivir con un mínimo de dignidad? Me parece muy hipócrita que haya gente que se escandalice por mis letras y no por toda esa violencia cotidiana que nos imponen. Me encantaría no tener que sentir rabia ni tener que manifestarla con canciones o escritos; significaría que vivimos en una sociedad justa.

¿Cree que puede haber cierto efecto Streisand con sus letras?

Totalmente. Y así está siendo. Yo tomé la decisión de quedarme aquí y no exiliarme. He estado dos veces en Bélgica y una en Venezuela, que son lugares donde se me ofrecía exilio. No lo he hecho porque no he hecho un análisis de lo que me interesaría más a mí a nivel personal, sino a nivel político. Si ellos están ejerciendo toda esta represión para silenciar el mensaje, yo hago este análisis: Yo empecé en esto para dar a conocer el mensaje, entonces solo tengo dos opciones: exilio o cárcel. ¿Cómo se va a difundir más el mensaje? Yo creo que encarcelándome, porque es algo más escandaloso, y que hasta nos da la razón. El exilio de Valtonyc ha contribuido a normalizar su situación y no a que haya más lucha y solidaridad. Si el que a mí me encarcelen va a generar más lucha que exiliarme, decido esto.

Es un acto político.

Totalmente, sí.

¿Se considera un preso político?

Objetivamente, incluso aunque pueda estar de acuerdo o no alguien con lo que defiendo, voy a ser un preso político, porque a mí se me encarcela por una lucha política.

A la luz de las últimas informaciones sobre las actividades del rey emérito, a quien tilda de ladrón en sus letras, ¿pensó que su caso podría dar un vuelco?

Es que cuando yo saqué las dos canciones sobre la monarquía, Muerte a los Borbones y Juan Carlos el Bobón, ya se sabía lo que hacía la monarquía. Otra cosa es que los medios de aquí hayan tapado todo esto durante décadas. Ha sido cuando los medios internacionales han empezado a destapar todo, cuando no han tenido otra que contarlo. Hemos sido condenados por injurias a la Corona, que no lo son, porque estamos contando hechos sobradamente probados, porque si demuestras que no son injurias te condenan igual. Ha servido para que mucha gente que pensaba que exagerábamos se diera cuenta de que nos han condenado por contar la realidad.

La libertad de expresión copa estos días el debate público, por su caso, pero también por la suspensión de la cuenta de Vox en Twitter por incitación al odio. Siendo de la cuerda ideológica opuesta, ¿qué opina?

Yo no soy hipócrita. Porque alguien me lleve la contraria no quiero que lo encarcelen, pero yo no estoy a favor de que haya libertad para el fascismo. Creo que no se puede poner en el mismo plano luchar por los derechos de los inmigrantes, los homosexuales o las mujeres, con lo que hacen ellos. El delito de odio está para proteger a colectivos que sufren este tipo de discriminación, pero le acaban dando la vuelta y lo utilizan contra nosotros. Sí que estoy a favor de que se persiga el fascismo.

¿Entendería que alguien calificase como delito de odio algunas de sus letras con referencias a tiros en la nuca?

Como digo, no voy a ser hipócrita, por supuesto que es odio. El Che decía que mayor que el amor a la libertad es el odio a quien te la quita. Yo odio las injusticias, a los culpables que se lucran a costa de imponerlas con violencia. Sí, yo muestro odio contra eso, pero ellos cuando definen lo que es un delito de odio no se refieren a proteger a los poderosos, sino a los colectivos oprimidos.

Todavía no sabe cuánto tiempo va a estar en prisión.

Sigo sin saberlo. Esa incertidumbre que me impedía hacer planes a corto plazo es parte de la condena, juegan a ese desgaste psicológico. Creo que también forma parte de ese juego el hecho de que a mí me encarcelen y no sepa ni a qué cárcel me van a enviar ni cuánto tiempo.

Fuente: El Periódico

 

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