El tema de Siria y otros considerados urgentes en el Congreso de Estados Unidos podrían postergar la reforma migratoria un par de años, comentó ayer el congresista republicano Raúl Labrador. “Tenemos la situación en Siria, tenemos la situación monetaria, la situación de lo que se llama el tope de la deuda, que es el límite de la deuda que tenemos en Estados Unidos”, dijo el legislador en entrevista con Jorge Ramos para el programa Al Punto de Univisión.
“Todas estas cosas están avanzando; son las cosas que tenemos que hacer ahora inmediatamente”, mencionó Labrador. “Desafortunadamente, yo pienso que eso va a retrasar un poco el debate acerca de inmigración”, advirtió.
Labrador fue entrevistado en la víspera del regreso del Congreso a sesiones este lunes, luego del periodo vacacional de legisladores en el verano.
Ramos dijo al congresista que si la reforma migratoria deja de proceder en 2013, para el siguiente año sería más difícil que avance, pues es año electoral.
“Estoy totalmente de acuerdo con usted”, respondió el legislador. “Creo que si no lo hacemos ahora en 2013, no va a suceder en 2014; y eso significa que vamos a tener que esperar hasta 2015”, comentó.
Dijo que pensaban debatir la reforma migratoria en octubre, “pero ahora con los problemas internacionales que tenemos y también en la nación, no creo que vamos a poder tener este debate hasta noviembre. Y realmente no sé si en noviembre se va a poder hacer”.
Labrador es uno de los pocos miembros de la mayoría republicana en la Cámara de Representantes que podría influir para aprobar una reforma migratoria.
Abogado de inmigración que representa al norte y el oeste del estado, Labrador es una de las voces más destacadas sobre el tema, utilizando su historia personal y experiencia profesional para exponer su causa. Labrador nació en Puerto Rico y se trasladó a Nevada con su madre cuando era niño. El inglés es su segunda lengua y dice saber por experiencia los desafíos que plantea llegar a una nueva tierra.
Entre otras cosas, Labrador desea un mejor seguimiento de los inmigrantes en Estados Unidos, para asegurar que se vayan cuando expiren sus visados. Pidió además dotar a los organismos policiales de mayores poderes para efectuar detenciones relacionadas con la inmigración.
“He trazado una línea roja en inmigración”, dijo el legislador. “¿Tendremos este debate dentro de 10 años? ¿Estamos solucionando el problema o solamente postergando el problema? El proyecto de ley del Senado solamente posterga el problema”.
Los activistas de la inmigración contradicen la tesis de Labrador de que es improbable una reforma este año, por considerar que las organizaciones religiosas, asociaciones agrícolas y empresariales son partidarias de una actuación este año.
“La presión de todos esos sectores diferentes e industrias seguirá empujando al Congreso a votar sobre la inmigración”, dijo la analista Laura Vázquez, del Consejo Nacional La Raza, en Washington.
Otros observadores dijeron que el tema de la inmigración seguramente no comenzará hasta octubre, ya que el Congreso tiene solamente en septiembre nueve días legislativos.
En inmigración, una de las prioridades del presidente Barack Obama en su segundo mandato, el Senado dominado por los demócratas presentó una amplia reforma en junio que incluye el camino hacia la ciudadanía. Los republicanos de la Cámara de Representantes rechazaron el plan a principios del mes pasado con la promesa de aprobar una legislación más limitada y centrada en la seguridad fronteriza.
El director en funciones del Servicio de Inmigración y Protección Aduanera emitió el 23 de agosto nuevas directrices, indicando a las autoridades policiales que antes de encarcelar a una persona que resida ilegalmente en el país deberían considerar si esa persona tiene hijos menores.
Por su parte, Labrador sostiene que ese tipo de órdenes reflejan el deseo del gobierno de Obama de desarrollar su propia agenda de inmigración sin consultar al Congreso.
“Obama hace todas estas cosas unilateralmente”, según Labrador, indicando que dichas directrices hacen cada vez más difícil reformar la ley de inmigración y minan la confianza.
“¿Cómo se puede obligar al gobierno a cumplir las nuevas leyes cuando dice a sus organismos policiales que no hagan cumplir la ley existente?”, preguntó Labrador, en una reciente entrevista con Associated Press.
Fuente: AP y Notimex