A 40 días de que venza el plazo para la entrega de agua a Estados Unidos en el contexto del Tratado Internacional de Aguas de 1944, aún faltan por trasladarse 366 millones de metros cúbicos de líquido (85 por ciento del equivalente a un año) a ese país, y para realizar la operación de envío se requiere tiempo, ha señalado la Comisión Nacional del Agua (Conagua), publica La Jornada digital.
Ante ello, el compromiso no se cumplirá en la fecha establecida. A menos que se presenten lluvias sin precedente en las próximas semanas, no habrá manera alguna de cumplir con las entregas establecidas y el 24 octubre México se encontrará en una situación de incumplimiento
, dijo la Coordinadora Nacional Agua para Todos.
Luego de que en el ciclo pasado, que concluyó el 24 de octubre de 2015, se cerró con un adeudo de 324.7 millones de metros cúbicos, cubierto en 2016, no es viable que por dos ciclos consecutivos ocurra esto, indica el Acta 234 de la Comisión Internacional de Límites y Aguas. Este documento se refiere a las aguas del río Bravo asignadas a Estados Unidos procedentes de los ríos Conchos, San Diego, San Rodrigo, Escondido y Salado, así como del arroyo Las Vacas.
Detalla la forma en que se debe reponer cualquier faltante que hubiera en un ciclo de cinco años consecutivos en los volúmenes mínimos
. Al año, México envía de esos cauces alrededor de 432 millones de metros cúbicos. El documento indica que en caso de que haya escasez en un ciclo, se repone en el siguiente, junto con cualquier volumen de agua que se necesite para evitar un faltante
. Al amparo de este documento, el gobierno mexicano ha argumentado que no puede tener un déficit en la entrega de agua para el ciclo que empieza el 25 de octubre.
La Coordinadora Agua para Todos señaló que desde el sexenio de Enrique Peña Nieto la Conagua permitió que se acumulara una deuda hídrica con Estados Unidos y en lugar de apoyar los procesos de construcción de consensos para las entregas, impulsó tratos particulares y desiguales con los distintos distritos de riego, aumentando con ello el conflicto social en la región
.
La organización propuso que se abra un diálogo amplio con fundamentos técnicos a través del Consejo de Cuenca del Río Bravo para explorar opciones, sin permitir la militarización del conflicto, así como que se sienten las bases para evitar un diferendo con Estados Unidos para el 24 de octubre, como ha ocurrido en ciclos anteriores.
Fuente: La Jornada