El Procurador General de México, Jesús Murillo Karam, dijo el jueves que no han identificado el motivo del ataque a tiros a una camioneta de la embajada de Estados Unidos en México en agosto y que dejó heridos a dos agentes de la CIA y un capitán de la marina mexicana.
Murillo Karam informó que hay evidencia de fallas en la conducta de los 14 policías federales, quienes enfrentan cargos por intento de homicidio. Funcionarios estadounidenses y mexicanos que hablaron con The Associated Press bajo condición de anonimato han dicho que se inclinaban a creer que se trataba de un ataque deliberado, orquestado por un cártel de la droga que predomina en el área al sur de la Ciudad de México, donde ocurrió el atentado.
“Analizamos mucho la posibilidad de intención. No la encontramos. Independientemente de ella, hay elementos claros en la actitud, en la conducta de los individuos que los atacaron”, dijo Murillo Karam en un foro económico. “Esperamos una sanción fuerte para quienes participaron”.
El funcionario federal fue nombrado procurador meses después del ataque en el gabinete del Presidente Enrique Peña Nieto, quien tomó protesta el 1 de diciembre. Murillo Karam dijo que ha invitado a los cuerpos policiacos de Estados Unidos a que estén presentes durante la investigación.
“Pensamos que es justa la investigación”, dijo Murillo Karam. “Es correcta”.
La emboscada del 24 de agosto hirió a los agentes de la Central de Inteligencia de Estados Unidos, CIA, y al militar mexicano, y dejó la camioneta diplomática con 152 impactos de balas. El caso ha sido delicado por involucrar a agentes de los dos países vecinos que colaboran en una ofensiva contra el narcotráfico.
A finales de 2012, las autoridades se centraron en cinco comandantes de policías, quienes fueron acusados de ordenarles a los 14 policías de mentir acerca de lo que pasó.
The Associated Press no pudo localizar inmediatamente a los abogados de los policías para obtener una respuesta a las declaraciones del procurador. La embajada de Estados Unidos en México no respondió de manera inmediata a una solicitud de información.
El procurador se expresó por primera vez en torno al surgimiento en las últimas semanas de grupos de autodefensa en diversas partes de México, al decir que el gobierno trabaja para desarmar a estos llamados “justicieros”.
“Rompen reglas que son fundamentales para poder vivir en paz”, dijo Murillo Karam.