Aldana Ibarra, quien también se desempeñó primer comandante de la Policía Judicial Federal, falleció la mañana del domingo en el Centro Médico Nacional a causa de un paro cardíaco, reporta Infobae
Jorge Miguel Aldana Ibarra, ex director de la Organización Internacional de Policía Criminal (Interpol) en México, falleció la mañana del domingo en el Centro Médico Nacional a causa de un paro cardíaco.
“Lamentamos profundamente el sensible fallecimiento del doctor Jorge Miguel Aldana Ibarra, y se une en la pena que embarga a su familia y amigos”, escribió el Colegio Nacional de Abogados Foro México A.C.
Aldana Ibarra, quien también se desempeñó primer comandante de la Policía Judicial Federal, contaba con una orden de aprehensión vigente en su contra por parte de la Administración para el Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés), debido a su presunta responsabilidad en el asesinato del agente estadounidense Enrique “Kiki” Camarena.
En la ficha de búsqueda de la DEA, la cual todavía puede ser consultada en su página oficial, las autoridades estadounidenses señalan a Aldana Ibarra como un hombre “armado y peligroso” que es requerido por la justicia debido a los siguientes delitos: “Conspiración para cometer crímenes violentos en apoyo al crimen organizado; Conspiración para secuestrar a un agente federal; Secuestro de un agente federal; Asesinato grave de un agente federal”.
Cuando era comandante de la Policía Judicial, fue señalado como responsable del asesinato de Enrique Camarena diez años después de que éste ocurriera. Su detención fue resultado de la Operación Leyenda, orquestada por jueces, fiscales y policías estadounidenses. También fue cuando señalaron a José Antonio Zorrilla Pérez, director de la Dirección Federal de Seguridad (DFS).
El comandante Aldana orquestó la Operación Pacífico, la cual supuso uno de los golpes más grandes al narcotráfico en México con más de 5.000 personas detenidas, 7.000 armas decomisadas y varias toneladas de droga que pretendían ser envíadas a través de los más de 450 trailers que se encontraban en el Rancho Búfalo.
Por aquel tiempo Aldana Ibarra había comentado a diversos medios de comunicación que Estados Unidos estaba involucrado en el trasiego de armas y drogas, además del lavado de dinero.
Miguel Aldana Ibarra se especializó en las áreas de información política en las corporaciones policiacas donde se desempeñó durante más de 34 años. Fue el segundo del comandante Florentino Ventura cuando éste ocupó el cargo por primera vez como jefe de la Interpol-México. A los dos días de tomar posesión como director de la DFS, José Antonio Zorrilla lo mandó llamar para que ocupara el cargo de coordinador general operativo administrativo.
Fue jefe de la Interpol-México del 9 de diciembre de 1982 al 2 de enero de 1985. En marzo de ese mismo año se mencionó que tenía nexos con narcotraficantes, sobretodo cuando se supo que en septiembre de 1984 varios agentes bajo su mando retiraron del aeropuerto de la Ciudad de México un cargamento de cocaína.
En el gobierno de Carlos Salinas de Gortari, la PGR informó en junio de 1989 que estaba sujeto a investigación, porque el excomandante de la Dirección Federal de Seguridad, Rafael Chao López, declaró que por instrucciones de Aldana Ibarra mensualmente entregaban diez millones de pesos al licenciado Zorrilla Pérez, titular de la DFS, como recompensa por el “disimulo” que la policía mantenía sobre el tráfico de drogas.
En febrero de 1990, fue detenido por agentes antinarcóticos de la PGR, acusado de posesión, compra y suministro de cocaína y acopio de armas. Estuvo privado de su libertad durante cuatro años y ocho meses en el Reclusorio Oriente y en el penal de máxima seguridad de Almoloya de Juárez.
En 1995, durante el gobierno de Ernesto Zedillo, un Tribunal Colegiado lo exoneró de los cargos. En una entrevista Aldana Ibarra aseguró que fue el entonces subprocurador en la Lucha contra el Narcotráfico, Javier Coello Trejo, quien le fabricó los delitos con el objeto de “hacerlo a un lado”, ya que se le había mencionado como posible subprocurador de la PGR.
“Me estuvieron golpeando cuatro días en los separos, ya me les iba a ir. Me pusieron dos veces la bolsa de plástico en la cabeza. Me llevaron al Reclusorio Oriente en una ambulancia. Dijeron que estaba así por abstinencia de droga, cuando en mi vida la había probado”, declaró.
”En todos lados hay gente metida (en el narco). No es algo nuevo”, refirió en otra parte de la entrevista.
Jorge Miguel Aldana Ibarra será velado este lunes en la funeraria Gayosso de Félix Cuevas.
Fuente: Infobae