Por CLAUDIA TORRENS
Julián Aldana se puso tan nervioso cuando vio que no llegaba su nuevo permiso federal de trabajo que decidió escribirle una carta al presidente Barack Obama.
El joven colombiano, de 22 años, había solicitado en el plazo correcto la renovación del permiso laboral que había logrado a través de un programa de alivio migratorio para jóvenes. Y, sin embargo, a pocos días del 4 de abril cuando expiraba esa autorización, el gobierno no le había enviado aún el nuevo documento renovado, imprescindible para poder trabajar legalmente en Estados Unidos durante dos años más.
“Estaba tan desesperado que ya no sabía qué hacer. No sabía qué iba a pasar con mi futuro”, dijo Aldana, que además del estrés sufrido no pudo acudir durante tres días a la oficina donde trabaja como asistente de un grupo de abogados en Nueva York debido a la falta de autorización.
Obama no le respondió la carta pero el joven recibió al cabo de poco su permiso laboral.
Más de 11.000 jóvenes inmigrantes en Estados Unidos que se beneficiaron del programa de alivio migratorio anunciado por Obama en el verano de 2012 han sufrido una desesperación parecida a la de Aldana. Perdieron durante algún tiempo o han perdido la habilidad de trabajar legalmente en el país porque el gobierno no puede renovar a tiempo la autorización laboral que les corresponde.
Los Servicios de Inmigración y Ciudadanía, conocidos como USCIS, admitieron los retrasos a The Associated Press y dijeron que se deben sobre todo a la necesidad de comprobar la información de los solicitantes ya que ésta puede haber cambiado desde su primera solicitud.
“USCIS ha oído que hay preocupación debido a retrasos a la hora de adjudicar algunos de estos casos y está analizando medidas para resolver este asunto sin comprometer la integridad del proceso de adjudicación”, dijo un portavoz de la agencia federal a AP.
El vocero, que no ofreció su nombre debido a políticas de la agencia, dijo que pide a los jóvenes que soliciten la renovación del permiso entre 120 y 150 días antes de la expiración de éste.
El gobierno aprobó un total de 65.181 renovaciones del permiso de trabajo después de que hubiera expirado. La cifra, sin embargo, incluye a jóvenes que solicitaron la renovación después del plazo de tiempo recomendado.
Para muchos, el problema no fue sólo la inhabilidad de trabajar. El permiso de trabajo que ofrece el programa de alivio migratorio permite obtener una licencia de conducir. Si el permiso expira, la licencia ya no es válida hasta que se obtiene la renovación de la autorización laboral.
César Vargas, un joven activista mexicano, tuvo ese problema. Su permiso laboral expiró el 19 de febrero y no recibió una renovación hasta fines de marzo.
“Conducía por Staten Island (Nueva York) con mi pasaporte mexicano. Era algo preocupante”, dijo Vargas.
Betsy Plum, de la Coalición de Inmigrantes de Nueva York, dijo que su organización empezó a recibir quejas sobre el problema en febrero.
Más de 600.000 jóvenes se han acogido al programa de alivio migratorio desde que éste arrancó en 2012 y, hasta ahora, 148.171 han obtenido una aprobación de la renovación del permiso laboral, señaló USCIS.
Fuente: AP