En los primeros dos meses de este año, las autoridades migratorias mexicanas detuvieron a 27 mil 180 centroamericanos indocumentados, entre ellos 4 mil 129 menores de edad, según cifras publicadas por el Instituto Nacional de Migración (INM).
Luego de capturarlos, el INM deportó en los meses de referencia a 25 mil 69 migrantes –un promedio de 424 por día–, de los que 3 mil 289 eran menores de edad para un promedio de 55 diariamente.
Las cifras anteriores ilustran el fenómeno que denuncian los activistas y defensores de derechos humanos diseminados en distintos puntos de la ruta: que desde la implementación del Programa Frontera Sur, en verano pasado, las autoridades mexicanas redoblan los esfuerzos para detener y luego deportar a los centroamericanos durante su tránsito por México.
Durante el mismo periodo del año pasado, el INM detuvo a 13 mil 821 centroamericanos –entre ellos 2 mil 148 menores de edad– y deportó a 12 mil 930 a sus países de origen –mil 605 menores de edad–, lo que representa la mitad de las deportaciones reportadas sólo en enero y febrero anteriores.
De las estadísticas que publicó el INM se puede deducir que el ritmo de deportaciones creció en los primeros dos meses del año: durante los 28 días de febrero las autoridades migratorias deportaron a 12 mil 938 centroamericanos, lo que representó una cifra superior en 807 al número de deportados durante el mes de enero, que contó con 31 días.
Noviembre pasado resultó el mes en el que las autoridades deportaron el mayor número de migrantes de todo el año: 11 mil 385. Aun así, esta cifra fue muy inferior al número de deportaciones del mes más corto de este 2015.
En enero y febrero pasados, 12 mil 146 migrantes deportados eran originarios de Guatemala, una cifra mucho mayor a los 8 mil 333 hondureños deportados, o a los 4 mil 335 salvadoreños y 248 nicaragüenses.
Lo anterior marca una ruptura con 2014, ya que al cierre de febrero de ese año, la población mayoritariamente representada entre los deportados provenía de Honduras.
Así, 5 mil 359 hondureños fueron deportados en enero y febrero de 2014, seguidos por 5 mil 192 guatemaltecos, 2 mil 168 salvadoreños y 102 nicaragüenses.
Fuente: Proceso