Por Francisco Javier Pizarro Chávez.
Las redes sociales, especialmente las de Facebook y Twitter, están siendo utilizadas para apoyar y/o cuestionar los mensajes de personajes políticos, medios de comunicación y del mismo presidente de la República, mediante Bots, (apócope de robot) que no es otra cosa mas que un programa informático que efectúa automáticamente tareas repetitivas a través de internet, también conocidos como usuarios fantasmas, mediante los cuales se infla una cuenta y se crea una falsa comunidad.
Estos robots informativos llegan a muchas cuentas, ya sea para promocionar un mensaje o bien para denostarlo. Pero no solo eso; también son utilizados para confrontar al máximo a usuarios reales que discrepan y para polarizar las diversas corrientes políticas e inducir el encono social.
Y es que la inmensa mayoría de los usuarios de las redes sociales desconocen que es un Bots. Dan por sentado que se trata de un ejercicio de usuarios reales que interactúan para manifestarse a favor o en contra de un tema o acto de interés público.
Afortunadamente periodistas profesionales como Alejandro Páez Varela, originario de Chihuahua y articulista del portal SinEmbargo.Mx; la reconocida periodista Carmen Aristegui, que ha sido víctima de los Bots, han empezado a indagar con el apoyo de expertos en los algoritmos (secuencia de pasos lógicos) del sistema computacional, mediante los cuales se ha creado ese programa informático, el cual ha diluido los beneficios del Internet y contaminado el espacio virtual cada vez con mucha basura y falsedad en las redes sociales en todo el mundo.
En su artículo de la semana pasada intitulado “Follow The Money”, nuestro paisano Alejandro Páez, señaló: “He leído y escuchado que cada vez hay mas acciones coordinadas, pagadas, para ir en contra del Presidente Andrés Manuel López Obrador en las redes. La última, la que pedía su renuncia, fue muy notoria; casi todos los analistas de metadatos que conozco dicen que se trató de un ataque donde hubo recursos quien sabe de donde”.
Y mas adelante subraya: “Desde hace algunos semanas algunos –se refiere a los analistas—supone que se están pagando granjas para atacar al Presidente con una estrategia de dos vías: aplacar el apoyo orgánico y alimentar tendencias contra López Obrador vengan de quien vengan. Opera como un “fondo” que está atento a las oportunidades. Por ejemplo, me dicen, la matanza de Minatitlán; fue amplificada en la red por personalidades y luego se echaron a andar bots que apoyaron cuentas”.
Y agrega: “Casi todos los análisis que yo he visto sobre los ataques a AMLO ubican a Felipe Calderón (y/o gente ligada al ex presidente) en las nubes de metadatos. No digo que él o su gente paguen los ataques, pero si brilla su participación”.
Cierra su extraordinario análisis con una pregunta que debe tener una respuesta puntual por el bien de México: “¿Quiénes están alimentando el cochinero? ¿Con que dinero y hasta donde están dispuestos a llegar?”
Carmen Aristegui, por su parte, hizo una entrevista el miércoles pasado a Carlos Páez (ignoro si es pariente de Alejandro) quien a petición de la periodista hizo un informe sobre los automatismos que han operado en Twitter alrededor de temas relacionadas con Aristegui, en particular el “Hastags Block Aristegui”, en el que se detectó a 1047 cuentas identificadas con bots que también participaron en la creación de la etiqueta “AMLO renuncia” y la de “AMLO vs Reforma”.
El presidente López Obrador también abordó el tema. En una de sus conferencias de prensa “mañaneras”, destacó que hay muchos “bots” en las redes sociales y que, “conservadores podrían echar a andar bots contra un diario (se refería al periódico Reforma) para cargarnos la culpa”. Pidió a Twitter y Facebook que intervinieran para aclarar quien o quienes están patrocinando la Granjas de bots, referidos.
Los “tweets” mas relevantes, abordados por los bots en forma sesgada, ya sea a favor o en contra, generan estrategias cruzadas entre los usuarios reales y los fantasmas, lo que distorsiona el auténtico debate político y social, esencial en todo régimen democrático.
Así que no se deje manipular por los robots cibernéticos. Piense y defina usted mismo lo que considera que es bueno y lo que es malo en el ámbito político, económico y social.
Si le gusta debatir en las redes sociales, hágalo con seres humanos de carne y huesos, no con algoritmos computacionales que como dice el encabezado de esta reflexión en Voz Alta, “Aviva el encono social”.
Veremos y diremos en que desemboca todo este basurero.
