Expertos en derechos humanos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) hicieron un llamado urgente para que Estados Unidos regularice el estatus y garantice los derechos de los “dreamers”, los jóvenes “soñadores” que forman parte del programa de Acción Diferida para Llegados en la Infancia (DACA) y ahora se enfrentan a su posible expulsión.
El llamado se produce a menos de un mes (5 de marzo) de que expire la iniciativa que otorga permisos de trabajo y prórrogas de dos años en la deportación para inmigrantes que entraron antes de cumplir los 16 años, terminaron sus estudios de secundaria o servicio militar, y no han cometido ningún crimen grave, destacaron en un comunicado.
De acuerdo con los expertos, terminar el programa sin una alternativa factible reforzaría los estereotipos raciales y estigmatizaría a los jóvenes migrantes trabajadores y respetuosos de la ley que son un activo para el país que consideran su hogar.
“Estados Unidos debería actuar ahora para garantizar los derechos humanos de las aproximadamente 800 mil personas que se han beneficiado del programa, en lugar de ponerlas en peligro”, declararon.
De igual manera, resaltaron que la mayoría de esos migrantes son mujeres jóvenes que ahora corren el riesgo de ser expulsadas a países donde hay altos niveles de violencia, anarquía y delincuencia.
“Un final abrupto del programa DACA interrumpirá las vidas de estos inmigrantes y causará una profunda pena y un daño irreparable al separar a sus familias y hacerlos vulnerables a la explotación y el abuso si son deportados a países donde apenas tienen vínculos”, advirtieron los expertos de la ONU.
Según el comunicado, los beneficiarios de DACA a menudo se conocen como “dreamers” o “soñadores”, y más de las tres cuartas partes de ellos llegaron de México, mientras que el resto proviene principalmente de El Salvador, Guatemala y Honduras. La mayoría tienen 25 años o menos, y muchos son estudiantes.
“El debate actual en el Congreso de Estados Unidos debe verse como una oportunidad para proporcionar caminos legales para que los migrantes sean regularizados y sus derechos humanos protegidos”, dijeron los expertos.
“La expiración del programa DACA crea incertidumbre y deja a los beneficiarios vulnerables ante la detención arbitraria y la aplicación discriminatoria de las leyes de deportación. También plantea preocupaciones sobre la expulsión colectiva y la devolución”, destacó el relator especial de la ONU sobre los derechos humanos de los migrantes, Felipe González Morales.
Los otros expertos de la ONU que firmaron el comunicado son: Elina Steinerte, vicepresidenta de Comunicaciones del Grupo de Trabajo sobre Detenciones Arbitrarias; Nils Melzer, relator especial sobre la tortura y otros tratos crueles, inhumanos o degradantes; Alda Facio, presidente del Grupo de Trabajo sobre la Discriminación en contra de las Mujeres en las Leyes y en la Práctica, y Tendayi Achiume, relatora especial sobre las formas contemporáneas de racismo.
Fuente: Apro
