Los padres de los 43 estudiantes de Ayotzinapa desaparecidos llegaron anoche a esta capital, donde participaron en una asamblea comunitaria, una marcha, un mitin y una posada, y demandaron “que se investigue al Ejército” por los hechos ocurridos en septiembre de 2014.
Luego de pernoctar en las instalaciones del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME), los padres –acompañados de distintas organizaciones– caminaron este viernes a la Plaza de Armas para abordar los vehículos que los trasladarían a la comunidad indígena de Xoxocotla, a unos 40 kilómetros al sur de la entidad.
Al llegar al zócalo se toparon con “El Rinoceronte”, una tanqueta del Mando Único policial de Morelos que regularmente hace guardia en esa zona del centro.
Lo rodearon y, al grito de “Nos faltan 43”, le colocaron pegotes de la XVII Acción Global por Ayotzinapa y México, ante la sorpresa de los elementos que se replegaron y evitaron roces con los padres.
Luego la caravana salió a Xoxocotla, donde realizaron una rueda de prensa en la que insistieron en la urgente necesidad de investigar al Ejército en relación con su posible participación en el caso de la desaparición de los 43 estudiantes.
También demandaron a la Procuraduría General de la República (PGR) mantener abierta la investigación y evitar darle carpetazo.
Lamentaron, asimismo, que por tercera ocasión no podrán celebrar la Navidad, “pues nuestros hogares continúan incompletos”.
“Mi hijo desgraciadamente tiene una niña que lo está esperando. Es otra Navidad en que nosotros los esperamos como madres y continuaremos, no hay evidencia científica que demuestre que nuestros hijos están muertos”, soltó Hilda Leguideño, madre de Jorge Antonio, señaló.
Agregó: “No podemos celebrar la Navidad como si nada hubiera pasado, no podemos pasar a otro capítulo, a otra agenda en este país, sin reconocer que tenemos este problema. Sin reconocer que 43 estudiantes hoy por hoy no aparecen en este país. No están y no se sabe qué ocurrió con ellos. Mientras esto siga así, es el deber de todos los mexicanos seguir exigiendo justicia”.
Vidulfo Rosales, abogado del Centro de Derechos Humanos de La Montaña Tlachinollan y vocero del grupo, expresó: “Ayer fue en Iguala, después en Tierra Blanca, ¿cuándo será aquí?, ¿cuándo será en otro estado, en otro municipio?, porque si seguimos diciendo eso, así se quedará sin justicia”.
Por ello, exigieron “que se investigue directamente la participación del Ejército Mexicano en la desaparición de los 43 estudiantes”.
Posteriormente los padres se reunieron con la asamblea popular de la comunidad, donde informaron de la necesidad de mantener la lucha hasta encontrar a sus hijos y a los más de 30 mil desaparecidos, producto de esta guerra que lleva diez años.
Comieron en la comunidad y luego se trasladaron de regreso a esta capital. En el acceso sur de la ciudad, a la altura de la glorieta del Niño Artillero, también conocida como Las Palmas, caminaron por avenida Morelos hasta llegar a la Plaza de Armas, donde llevaron a cabo un mitin e insistieron en la necesidad de continuar la búsqueda de los desaparecidos.
Mas tarde, integrantes de la Comunidad Lésbico Gay organizaron en la misma Plaza de Armas una posada para los padres y para los niños de la calle e indigentes de la ciudad. El acto terminó a las 6:30 de la tarde.
Este sábado, los padres viajarán a Tepoztlán, donde encabezarán una asamblea popular y acto informativo sobre su lucha, y en la tarde irán a la comunidad de Amilcingo, en el oriente de la entidad.
Fuente: Apro