Hablar claro sobre la situación de derechos humanos en México está en la agenda del Papa Francisco durante su viaje por el País. “Lo haré e intentaré ser claro, hablar claro”, respondió el Pontífice al preguntársele si los casos de violaciones de derechos humanos en el País estarían incluidos en sus mensajes.
En este línea, el Papa dijo no saber aún si se encontrará en privado con los familiares de los 43 estudiantes desaparecidos en Ayotzinapa.
Durante un breve encuentro abordo del avión papal, Francisco destacó su deseo de encontrarse con la Virgen de Guadalupe.
“Un deseo que tengo es pararme delante de la Virgen de Guadalupe”, subrayó.
Pese a que se trata de una de sus giras más complejas, el Papa Francisco se mostró hoy sereno, alegre y de buen humor cuando, durante el vuelo hacia Cuba -primera etapa de una gira que también lo llevará a México-, pasó a saludar a los periodistas.
En medio de la gran expectación por su viaje a México, el Papa usó incluso su sentido del humor y bromeó.
“No todos los mexicanos son ateos, solo algunos, eh”, ironizó, hablando de la especial devoción que hay en México por la virgen de Guadalupe.
Asimismo, recalcó que tanto él como las autoridades mexicanas han querido que se llevará a cabo su desplazamiento a México.
El Papa -que despegó de Roma rumbo a Cuba con más de media hora de retraso- apareció en la parte trasera del avión Airbus A330 del vuelo AZ4000 de Alitalia, cuando estaba sobrevolando España.
En ese entonces, el desayuno -frutas, yogur y quesos, con café y té- ya había sido servido y habían pasado algunas turbulencias atmosféricas.
Como suele ocurrir, el Papa recibió cartas y regalos de todo tipo, libros, imágenes sagradas y dialogó brevemente con cada uno de los 76 periodistas que lo acompañan.
Un periodista colombiano, Néstor Pongutá, le preguntó si viajará próximamente a su país y el Papa contestó que es muy probable.
“Tengo ganas. Si se asienta la paz y queda firme, entonces estoy seguro el año que viene”, dijo.
Entre otras cosas, Francisco recibió una caja de chocolates, dos rosas, varios libros, un par de zapatillas, e incluso una medalla de metal de la virgen de Guadalupe que bendijo.
El Papa Francisco aseguró hoy que unas películas del cómico mexicano Cantinflas le abrieron las puertas de México antes de su llegada al país y aseguró haber reído mucho con sus bromas.
En un diálogo con los periodistas a bordo del avión que lo lleva de Roma a La Habana, en su camino a tierras mexicanas, el Pontífice aseguró que las películas que recibió esta semana del actor lo hicieron entrar como en un “túnel del tiempo”.
Fuente: Reforma
