Después del escándalo mundial que provocó el anunció de que Instagram podría vender las fotos de sus usuarios a partir del 16 de enero, con y sin permiso, la empresa informó que se trató de un error.
La red social de fotos Instagram respondió a la polémica en torno al cambio en sus políticas de uso, disculpándose por el lenguaje que utilizó al plantear los nuevos lineamientos y aclarando que no es su intención vender las fotos de los usuarios, según Reforma.
Kevin Systrom, cofundador y director ejecutivo de Instagram, se disculpó por la molestia desatada entre su comunidad de usuarios tras dar a entender en las nuevas políticas que podría vender las imágenes con fines publicitarios, sin previo aviso y sin compensación para los usuarios.
Por la mañana, las agencias informativas difundieron que, tras su adquisición por Facebook, el servicio Instagram introduce los primeros cambios significativos en sus términos y condiciones de uso, lo que amenaza con generar la repulsa masiva de los usuarios.
Con información de Actualidad RT