Un grupo armado privó de la libertad a tres periodistas de la televisora árabe Al Jazeera en la comunidad de Villa Juárez, municipio de Navolato, durante la madrugada de este miércoles, de acuerdo con una denuncia interpuesta por los afectados ante la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE).
Los comunicadores, dos de ellos extranjeros, fueron amenazados por los gatilleros, al parecer integrantes del cártel de Sinaloa, y despojados del equipo y del vehículo en que viajaban.
La región de Navolato está en pugna entre grupos del cártel de Sinaloa, comandados por los hijos de Joaquín Guzmán Loera, El Chapo -Alfredo e Iván Archivaldo- y Dámaso López Núñez, El Licenciado.
En lo que va del año suman en la entidad cerca de 360 homicidios, la mayoría en los municipios de Culiacán, Mazatlán y Navolato. Alrededor de 60 asesinatos corresponden a comunidades como Villa Juárez, El Castillo, San Pedro y Sataya, ubicadas en Navolato, de enero a lo que va de marzo.
En la entidad hay cerca de mil 800 policías militares en los 18 municipios, a los que se suman 900 militares que arribaron a esta ciudad capital el martes, para reforzar las labores de vigilancia en Mazatlán y Culiacán.
Los periodistas de la televisora árabe Al Jazeera –una española, un británico y un mexicano- realizaban un reportaje sobre la violencia en Villa Juárez, una comunidad conformada en su mayoría por jornaleros agrícolas y la más grande que tiene el municipio de Navolato. En esta población fueron interceptados por un grupo armado, que los despojó de sus equipos y el vehículo en que viajaban.
Información de las corporaciones policiales indica que esta agresión fue la mañana de este miércoles.
Al parecer, los reporteros se identificaron como periodistas ante los hombres armados y éstos les quitaron sus equipos, así como el vehículo en el que circulaban, el cual fue localizado en las inmediaciones de la comunidad de Costa Rica, en el municipio de Culiacán, gracias al localizador satelital (GPS) con que cuenta el automóvil, que los comunicadores habían rentado.
Según la información, los periodistas fueron amenazados para que se retiraran del lugar y dejaran de grabar. Fuentes de la Procuraduría General de Justicia señalaron que ninguno de ellos fue lesionado y que la privación ilegal de la libertad duró alrededor de 45 minutos.
Fuente: La Jornada