Ante la presión de las estrellas en el caso ‘CelebGate’ que amenazan con demandar, la compañía aseguró que “ya ha borrado decenas de miles de imágenes”
El gigante informático Google, que ha sido amenazado con ser demandado por 100 millones de dólares por parte de los representantes legales de más de una docena de celebridades -entre las que se encuentran Jennifer Lawrence, Cara Delevingne, Rihanna y Amber Heard- por no borrar de sus servidores los vídeos y fotografías filtrados, en los que se ve a las artistas desnudas; se ha defendido diciendo que desde que les llegaron la primeras peticiones han estado trabajando duro para eliminar de sus sitios web dicho material.
“Hemos borrado decenas de miles de imágenes, empezando pocas horas después de recibir las peticiones, y hemos cerrado cientos de cuentas. Internet se usa para muchas cosas buenas. Robar fotos privadas de gente no es una de ellas”, señaló un portavoz de la compañía a la sección Page Six del diario New York Post.
Hace tan solo unos días, Marty Singer -prestigioso abogado estadounidense a cuyos servicios recurren frecuentemente las estrellas de Hollywood- envió una dura carta a los fundadores de Google, Larry Page y Sergey Brin, así como a Eric Schmidt y a los abogados de la compañía, en la que los acusa de “comportamiento poco ético y premeditado”.
El documento continúa señalando que Google ha fallado a la hora de “actuar de forma inmediata y responsable en la eliminación de las imágenes a sabiendas de que estaban facilitando y perpetuando una conducta ilegal, además de haber ganado millones a costa de la victimización de las mujeres”.
Esta no es la primera vez que el abogado de las artistas se pone en contacto con Google, hace ya cuatro semanas solicitó a la compañía que eliminase las imágenes filtradas, petición que fue seguida de otros tantos requerimientos amistosos. Todos ellos, según el abogado, ignorados. A día de hoy muchas de las fotografías continúan en BlogSpot y YouTube, ambas propiedad de la empresa estadounidense.
“Google sabe que las imágenes son robadas. Material de carácter privado y confidencial que ha sido conseguido de forma ilegal y difundido por depredadores pervertidos que están violando el derecho a la privacidad de las víctimas. Mientras tanto Google ha tomado medidas escasas o nulas para detener estos abusos. Debido a que las víctimas tienen valiosos derechos publicitarios, ustedes [Google] no hacen nada… salvo ingresar en sus cuentas millones de dólares a través de publicidad en Internet. Su interés es capitalizar este escándalo más que detenerlo”, explicaba Marty Singer a la misma publicación.
Fuente: Showbiz/ La Opinión