La comunidad argentina de gays recibió el jueves con acritud el nombramiento de Jorge Bergoglio como líder mundial de la Iglesia Católica al recordar que como cardenal convocó hace unos años a una “guerra de Dios” contra la aprobación de la ley de matrimonio igualitario.
Buenos Aires— El ahora papa Francisco “fue la cara visible de la oposición de la Iglesia Católica a la ley de matrimonio igualitario y lo hizo desde una postura fundamentalista, planteando que había que llevar adelante la guerra de Dios en contra de lo que consideraba un plan del demonio”, dijo a The Associated Press Esteban Paulón, presidente de la Federación Argentina de Lesbianas, Gays, Bisexuales y Trans (FALGBT).
El cardenal Bergoglio, un jesuita de 76 años, fue un férreo opositor a la aprobación en julio de 2010 de la ley que permite a las parejas del mismo sexo contraer matrimonio adquiriendo así los mismos derechos civiles de los que gozan las parejas heterosexuales. Esa norma convirtió a Argentina en pionera en la materia en América Latina.
La aprobación de la norma que defendía el gobierno de la presidenta Cristina Fernández fue precedida por el casamiento en diciembre de 2009 de los argentinos Alex Freyre y José María Di Bello en la ciudad sureña de Ushuaia. La ceremonia fue posible gracias a un decreto de la gobernadora de la provincia de Tierra del Fuego, quien acató el fallo de inconstitucionalidad de dos artículos del Código Civil que limitaban el matrimonio a personas de distinto sexo, dictado previamente por una jueza. Poco tiempo después, un magistrado declaró “inexistente” el matrimonio.
Freyre, director de la Fundación Buenos Aires Sida, dijo en su cuenta de Twitter que el papa Francisco “sabe que el matrimonio igualitario no es el fin del mundo ni de la especie, ahora podrá contarlo en latín”.
“Quizá el hecho de que el Vaticano haya elegido un papa de un país donde hay matrimonio igualitario es una señal de que entendieron… (?)”, preguntó el activista homosexual, quien abogó porque el pontífice “dé a la Iglesia una renovación que le haga retomar la senda de la espiritualidad”.
Paulón exhortó en tanto a Bergoglio a que “reflexione” y a que promueva una reforma en el seno de la Iglesia. “Ha visto que Argentina no ha sufrido ninguna conmoción con la ley de matrimonio igualitario… ahora difícilmente pueda argumentar sobre el caos o la discordia que puede traer una norma de este tipo; no se destruyó la familia, ni llegó el anticristo.”
Sin embargo, el activista se mostró poco optimista sobre la posibilidad de que pueda haber “un cambio de visión de la jerarquía católica”.
Paulón recordó que siendo titular de la Conferencia Episcopal Argentina Bergoglio se mostró como un acérrimo opositor al aborto y también se manifestó contrario a la ley de educación sexual integral que permite el acceso gratuito a anticonceptivos y a la de identidad de género. Esta última establece que toda persona tiene derecho al reconocimiento de su identidad de género tal como la siente, corresponda o no con el sexo biológico con el que nació.
Ello determinó un progresivo distanciamiento con el ex presidente Néstor Kirchner (2003-2007) y con su viuda y sucesora, la presidenta Fernández, quien pese a su tensa relación con el cardenal argentino tiene previsto acudir a su misa de entronización como pontífice el 19 de marzo en el Vaticano.
En tanto, el vice provincial de los jesuitas de Argentina y Uruguay señaló a la AP que Bergoglio “es bastante conservador” y sus opiniones son las posiciones tradicionales de la Iglesia. Sin embargo, valoró positivamente su gran capacidad pastoral a la hora de intentar atraer a más personas al catolicismo. “Aunque a veces las opiniones puedan parecer duras, él tiene eso, primero las personas”, sostuvo.
Por otro lado, la comunidad gay reconoció los intentos que hicieron Bergoglio y referentes cercanos al jesuita porque prosperara finalmente la unión civil de homosexuales en lugar del matrimonio. Era una propuesta contemporizadora en momentos en que se producía un fuerte debate en Argentina entre sectores conservadores y progresistas.
Dentro de su conservadurismo moral “Bergoglio tiene fama de ser moderado y hacer equilibrios entre los sectores reaccionarios y los progresistas, que son los minoritarios”, dijo Paulón.
“En el debate interno de la Conferencia Episcopal Argentina, el ala dura ganó el debate. Al final, cuando Bergoglio sale fuertemente a hablar contra la ley del matrimonio gay, lo hace presionado por bases conservadoras”, afirmó.
Según analistas consultados por la AP, un eventual cambio en el Vaticano sobre ese y otros aspectos no dependerá del cardenal argentino, ya que tendrá lugar un debate interno entre distintas facciones.
Adolfo Pérez Esquivel, uno de los principales líderes de derechos humanos de Argentina y Premio Nobel de la Paz, dijo al respecto a periodistas que Bergoglio es un hombre “abierto al diálogo” y que espera que el nuevo papa “forme equipos que le puedan ayudar a efectuar esos cambios que la Iglesia necesita”.
Fuente: AP