El dueño de Bepensa –la embotelladora de Coca Cola en la Península de Yucatán–, Fernando Ponce García y su yerno Ermilo Castilla Roche y el consocio inmobiliario Grupo Ara, que integran la empresa Península Maya Development, dieron ayer un golpe definitivo para apoderarse de la isla de Holbox, en el extremo norte del estado de Quintana Roo.
En una asamblea ejidal, que duró una hora y 10 minutos, se aprobó dividir la paradisiaca ínsula en cuatro ejidos: Holbox, Península Holbox, Isla Holbox y Punta Holbox.
En el marco de esta asamblea, el titular de la Secretaría Estatal de Seguridad Pública (SESP), Carlos Bibiano Villa Castillo, atropelló y lesionó a un ejidatario de Holbox.
En tanto, pobladores de Holbox dijeron que tomarán la representación del gobierno municipal en la isla.
En esta asamblea, celebrada en Kantunilkín, cabecera del municipio de Lázaro Cárdenas, al que también pertenece Holbox, participaron 70 empresarios y prestanombres yucatecos, que obtuvieron presuntamente de manera ilegal derechos ejidales de igual número de holboxeños.
La asamblea había sido convocada en el restaurarte La Normita, pero se celebró en otro recinto localizado casi a un kilómetro de distancia, el restaurante bar María Itzel, propiedad del síndico municipal de Lázaro Cárdenas, Luis Campos Álvarez y ubicado en la salida a Tizimín, Yucatán.
Los locales La Normita y el de María Itzel fueron custodiados por granaderos de la Policía Estatal Preventiva.
De igual forma, fueron colocados retenes en la carretera Cancún-Kantunilkín y en la entrada de esta última ciudad.
Pero, además, el restaurante bar María Itzel, en donde se llevó a cabo la asamblea, fue custodiado por un grupo de golpeadores que portaban un brazalete de color gris.
Los granaderos sólo permitieron el ingreso de “ejidatarios” procedentes de Mérida, y se negó la entrada a comuneros holboxeños, aunque la mayoría optó por permanecer en las inmediaciones de La Normita.
El comisariado ejidal de Holbox, Nirvardo Mena Villanueva, a quien también se le negó el acceso a María Itzel, denunció que la asamblea era ilegal pues de manera indebida fue cambiada la sede.
Anticipó que impugnará esta asamblea y advirtió que el grupo de Ponce y Castilla Roche podrá torcer las leyes pero no se apoderarán de Holbox.
“Ahí los esperaremos con los brazos abiertos”, retó.
Armando Miranda, abogado de los ejidatarios, dijo que la asamblea violó sendas suspensiones provisionales de juzgados de distrito de Cancún y Chetumal, la capital del estado.
El rumor de que ejidatarios llegaron al local María Itzel provocó que fuera acelerado el desarrollo de la asamblea, que cuando concluyó, los ejidatarios yucatecos salieron a toda prisa en sus automóviles por la carretera a Tizimín.
Casi de manera simultánea, los granaderos que impedían el acceso al restaurante La Normita se retiraron del lugar.
Pero la camioneta tripulada por el titular de la SESP, Villa Castillo, se abrió paso entre los ejidatarios y atropelló a Fausto Ancona, que resultó con un pie herido.
La acción del funcionario enardeció los ánimos y policías y ejidatarios intercambiaron pedradas.
Los policías recurrieron a gases lacrimógenos para dispersar a los ejidatarios.
Más tarde, pobladores tomaron la sede de la representación municipal en la isla para manifestar su repudio al apoyo que el alcalde de Lázaro Cárdenas, Luciano Cima y de la autoridad local en la isla, José Manuel Pérez Moguel
Fuente: Apro