El paradigma del ‘big data’, esa recolección masiva de información de la que se obtiene conocimiento gracias a los algoritmos y a la inteligencia artificial, se está imponiendo en la gestión de las grandes ciudades del mundo. Dubái, con su permanente apuesta por la tecnología, no es una excepción.
En este caso, además, la plataforma que aúna toda esa información (en forma de ‘open data’, o sea, disponible para todos los actores implicados en la vida de la ciudad), llamada Smart Decision Making Platform, también se pone al servicio de los ciudadanos. Un empresario que se plantea abrir un nuevo local en la ciudad y no sabe dónde. Una familia a la que se le ha quedado pequeña la casa y busca un nuevo lugar para sus planes vitales. Cualquiera puede acudir a esta plataforma inteligente, plantearle sus preferencias, y obtendrá una respuesta.
Dubái tiene como guía la felicidad de los ciudadanos, y para ello ha adoptado varias tecnologías. Entre ellas, ha engarzado la tecnología móvil en la misma gestión pública. Es lo que llaman m-Government. Como claro ejemplo de ello, Dubái tiene una aplicación llamada Smart Majlis. Majlis es el nombre de las asambleas en las que la comunidad decide qué hacer. Con la aplicación, cualquier ciudadano puede sacar una foto de algún servicio que le gusta, enviársela al gobierno de la ciudad, y explicar las razones por las que cree que debería adoptarse. Los funcionarios tienen que responder en dos semanas. Si tras estudiarse, se adopta el servicio, el ciudadano recibe una compensación. La transformación digital está coordinada por la Oficina de Dubái Inteligente, liderada por Aisha Bin Bishr.
Directora de la Oficina de Dubái Inteligente
Aisha Bin Bishr es doctora en Management, Ciencia, Tecnología e Innovación, por la Manchester Business School. Posee también una formación más amplia en filosofía, de la que es doctora por la Universidad de Manchester. Lleva más de década y media vinculada al gobierno de la ciudad, y en la actualidad dirige la oficina que lidera la transformación digital de Dubái desde una perspectiva “holística”, ella misma apunta.