Joe Arpaio, que se autodenomina el jefe policial más estricto de Estados Unidos, podría tener un nuevo enemigo en momentos en que busca ser reelegido por séptima ocasión: George Soros, el magnate de fondos de cobertura de Nueva York.
Un grupo respaldado por el multimillonario de Nueva York está enviando volantes en contra del jefe de policía de Maricopa, Joe Arpaio, a los residentes del área de Phoenix.
El grupo comenzó a enviar volantes a los votantes del área de Phoenix hace dos semanas, y un correo la semana pasada en el que acusa a Arpaio de la separación de una madre de su hijo a causa de una multa de tráfico sin pagar, de emprender cientos de investigaciones de delitos sexuales y de amedrentar a los inmigrantes para que reporten crímenes.
Arpaio niega las acusaciones y tiene capacidad para devolver el golpe, ya que dispone todavía de un formidable fondo de $ 2.9 millones para su campaña antes de las votaciones del 8 de noviembre, mientras que su rival Paul Penzone, un ex sargento de la policía de Phoenix tiene apenas 326 mil dólares. Arpaio ya ve ción a Penzone en 2012.
Pero la entrada de un grupo vinculado a Soros es un regalo inesperado para Penzone, quien reconoce que nunca va a estar cerca de igualar los gastos de campaña de Arpaio.
El volante anti-Arpaio, que destaca la frade de: “El miedo es el único resultado de la agenda de Joe Arpaio”, lo acusa de estar “obsesionado con los inmigrantes, a expensas de su trabajo” y de hacer “a las comunidades de inmigrantes temerosas de reportar el crimen por miedo a ser acosados por la oficina del Sheriff.”
Arpaio, de 84 años, ha negado que es anti-inmigrante, pero tiene una asignatura pendiente que incluye una revisión de su cargo después de que sus agentes fueron acusados por un juez federal de mantener un perfil racial contra latinos desde las patrullas de tráfico.
Arpaio fue encontrado en desacato civil por no impedir las redadas después de que el juez ordenó detenerlas en diciembre de 2011. Los fiscales federales están por determinar si presentan un cargo criminal por el desacato, que se castiga con hasta seis meses de cárcel si es clasificado como delito menor y un rango de sentencia sin especificar si se considera un delito grave.
(Con información de AP y Terra)