La Procuraduría de Justicia de Zacatecas difundió la foto del cadáver de Sergio Rafael Barraza Bocanegra, asesino de Rubí Marisol Frayre Escobedo, quien fue abatido durante un enfrentamiento entre el Ejército y una célula de Los Zetas.
La identidad del homicida, perteneciente a una célula criminal de Los Zetas, fue plenamente corroborada por una mujer que se dijo su esposa, quien llegó al anfiteatro de la Policía Ministerial del Estado acompañada de cinco menores, entre ellos un recién nacido, al parecer todos hijos de El Piwi, de 28 años, según el periódico Imagen.
De acuerdo con el diario, las autoridades también lo corroboraron mediante diversas pruebas como perfiles genéticos, huellas dactilares y cotejo de fotografías que fue buscado en Fresnillo, donde se dijo que se estableció con una mujer y la madre de ella en el 2010.
Según la Procuraduría de Zacatecas, “se certificó un tatuaje que tiene con el nombre de Rubí, la joven con la que vivía en unión libre, asesinó, desmembró y luego tiró los restos de sus cuerpo en una granja de cerdos en Ciudad Juárez, crimen del que se declaró confeso”.
No obstante, la Fiscalía General de Chihuahua dio a conocer que un equipo de Ciudad Juárez se trasladará a Zacatecas para corroborar la identidad de Barraza Bocanegra mediante análisis forenses y huellas digitales.
El procurador general de Justicia de Zacatecas, Arturo Nahle García, informó que desde el 17 de noviembre que ocurrió el tiroteo entre militares y un grupo criminal en la carretera Tabasco-Joaquín Amaro y del que resultaron cuatro presuntos criminales abatidos, sus cuerpos permanecían en el Servicio Médico Forense, en calidad de desconocidos.
El procurador zacatecano dijo que este jueves, personal de la Fiscalía de Chihuahua llegará a Zacatecas para documentar su muerte porque los expedientes del asesinato de Rubí radican allá junto con el de Marisela Escobedo Ortiz, madre de Rubí, de quien se le acusaba de ser autor intelectual.