López Obrador viaja a la comunidad autónoma española para presentar su proyecto político. Y el mandatario de Cantabria se dirige a AMLO como futuro “presidente”
Santander. El líder del partido Morena y aspirante a la candidatura presidencial de México, Andrés Manuel López Obrador, se comprometió a acabar con la corrupción si llega al poder en 2018, al señalar esta lacra como la principal responsable de la violencia y del desfalco sistemático del erario.
El dirigente político inició una gira de dos días en la comunidad autónoma española uniprovincial de Cantabria, donde además de reunirse con empresarios, inversionistas, académicos, universitarios y dirigentes políticos para hablar sobre su proyecto para México, se sumergió en la historia de sus propias raíces familiares, que proceden de un pequeño pueblo de la zona llamado Ampuero. El primer acto de López Obrador fue en la Universidad de Cantabria, donde guardó un minuto de silencio por los fallecidos la noche del jueves durante el temblor en México.
Después de visitar Estados Unidos y Londres, donde sostuvo encuentros con líderes políticos como el influyente y prestigioso dirigente de la izquierda británica Jeremy Corbyn, López Obrador viajó, vía Bilbao, a Santander, la capital de Cantabria, cuyo presidente, Miguel Ángel Revilla, lo presentó como el futuro presidente de México
y un político honesto
que quiere solucionar los problemas de su nación.
Durante su intervención, el político originario de Tabasco se mostró convencido de que la que sería su tercera candidatura a la Presidencia de México será la vencida
y ganará porque tiene un proyecto para regenerar al país y atacar las deficiencias desde la raíz.
El principal problema de México es la corrupción. Es la causa principal de la desigualdad social y económica y por eso la pobreza. También por eso se desataron la inseguridad y la violencia, y nos duele mucho que se estén cometiendo un promedio de 68 homicidios diarios en el país. Estamos pasando una crisis muy delicada y tenemos que hacer la paz. Tenemos que llegar a un acuerdo para pacificar al país y terminar con la violencia. Pensamos que debe cambiar la estrategia aplicada desde hace 10 años y que ha consistido básicamente en el uso de la fuerza, en medidas coercitivas. Se quiere apagar el fuego con el fuego y no se puede. No se puede enfrentar el mal con el mal. La paz y la tranquilidad son fruto de la justicia
, señaló López Obrador, quien estuvo acompañado por el rector de la Universidad de Cantabria, Ángel Pazos Carro, y la vicepresidenta de Cantabria, Eva Díaz Tezanos.
Una décima parte del presupuesto nacional
También advirtió que, según sus cálculos, los políticos corruptos
se roban alrededor de 30 mil millones de dólares cada año, es decir, entre 500 mil y 600 mil millones de pesos. Nuestro presupuesto nacional es de 5 billones de pesos; por lo tanto, se roban, por lo bajo, alrededor de 10 por ciento. No hay ninguna banda en México, y posiblemente en el mundo, que robe tanto. Y eso es lo que vamos a combatir. Se va a acabar la corrupción y sabemos cómo hacerlo, además de que tenemos convicciones y autoridad moral para hacerlo
.
El líder de Morena también dio especial énfasis a su proyecto educativo, con el que aspira a no dejar a ningún ciudadano sin acceso a la educación pública, además de desarrollar un plan general de formación que permitirá a los jóvenes no sólo aspirar a un futuro laboral más promisorio, sino también alejarlos de la violencia y del narcotráfico.
López Obrador aprovechó su viaje para visitar Ampuero, un pueblo de la cordillera cantábrica donde nacieron su bisabuelo y su abuelo, en lo que era el cuartel de la Guardia Civil y que hoy es la casa de cultura. José Obrador Revuelta, su abuelo, emigró a México a principios del siglo XX, se casó con la hija de un asturiano y montó un negocio de ultramarinos.
Fuente: La Jornada