Después de tres días de caminar, los integrantes de la caravana por la justicia, la dignidad y la libertad del pueblo migrante decidieron permanecer este martes en el municipio de Huixtla, con el objetivo de reorganizarse para continuar su camino, informó Luis García Villagrán, director del Centro de Dignificación Humana.
“Esperamos la jornada más difícil de Huixtla a Mapastepec, que son 60 kilómetros, donde la estrategia militar del Instituto Nacional de Migración (INM) tratará de desintegrar la caravana”, como en ocasiones anteriores, advirtió.
En entrevista telefónica, el activista reveló que en un recorrido por la zona descubrió que “hay un agrupamiento de cuando menos 500 agentes de la Guardia Nacional en Mapastepec preparados para cercarnos. Por eso nos vamos a reorganizar”.
Aseguró que del sábado a la fecha el número de extranjeros que participan en la caravana ha aumentado. “Sin dudarlo, son más de 4 mil”, aseveró. Por lo mismo, dijo, los migrantes se quedaron en la parroquia de Huixtla y sus alrededores, pues el domo en el que inicialmente se instalaron resultó insuficiente.
“Heyman (Vázquez Median, párroco de Huixtla), a quien agradecemos, nos hizo favor de atendernos y nos dará al menos dos alimentos”, expresó.
García Villagrán señaló que agentes del INM han detenido a “pequeños grupos. Todos tienen documentos; los traen a Tapachula y los dejan por ahí; a algunos los metieron en la estación migratoria Siglo XXI y a otros los llevan a albergues. “Los estoy esperando para regresarlos a Huixtla con la caravana; de 20 a 30 personas detienen, pero el grueso va aumentado”. Comentó que los detenidos “no pueden ser deportados porque están amparados”.
La caravana salió el sábado de Tapachula con más de 2 mil migrantes que buscan llegar a la Ciudad de México, en protesta por la dilación en la respuesta a su solicitud de asilo o de libre tránsito en México.
Fuente: La Jornada
