Por Víctor M. Quintana S.
La consultitis tardía, un mal que sólo se presenta en tiempos preelectorales y electorales ha atacado al presidente del Comité Ejecutivo Nacional del PAN, Gustavo Madero. En efecto, la cabeza visible del blanquiazul ha lanzado una consulta nacional para el incremento de los salarios mínimos. Al respecto hay que decir lo siguiente:
1. Madero llega tarde a enarbolar la bandera del incremento salarial para fines electorales: hace mucho tiempo que el jefe de Gobierno del DF, Miguel Ángel Mancera, cuya popularidad va en caída libre, ha insistido en la necesidad de revisar el tema y llevar a cabo incrementos significativos. Bueno, hasta el gobernador de Chihuahua, César Duarte, aquejado de una creciente impopularidad, ha elegido también la tablita del tema salarial para salvar la prueba electoral de 2015.
2. No es creíble la súbita conversión de Madero a la necesidad de consultar los temas importantes con la población. ¿Cuándo propuso llevar a consulta toda la reforma en telecomunicaciones? ¿Por qué antes de votar las 21 reformas a leyes secundarias y a los artículos 25, 27 y 28 constitucionales que constituyen la reforma energética no llevó todo esto a consulta con la ciudadanía? ¿Por qué antes de endilgarnos a los contribuyentes con buena parte de los pasivos laborales de PEMEX y de la CFE no nos preguntó a nosotros que somos quienes vamos a pagar con menos servicios sociales, menos educación, menos salud, peores servicios públicos? ¿Nos preguntó a las y los mexicanos si estábamos de acuerdo en autorizar el Fracking para extraer gas de lutita con los consiguientes desperdicios de agua y perjuicios al medio ambiente? ¿Nos preguntó si estábamos de acuerdo en que los legisladores de su partido reciban bonos especiales –subvenciones extraordinarias– por participar en las sesiones sobre las “reformas estructurales”?
3. El proponer ahora que se consulte sobre el muy necesario incremento al salario resulta contradictorio con la práctica de los gobiernos panistas de Fox y de Calderón. Vaya alguna numeralia, a partir de los datos del Centro de Análisis Multidisciplinario de la UNAM:
• Durante esos doce años el poder adquisitivo de los salarios no se incrementó en un solo centavo; entre el primer trimestre de 2005 y el primero de 2014 (los dos últimos años de Fox, todo el sexenio de Calderón y el primero de Peña Nieto), el Índice de Tendencia Laboral de la Pobreza que mide el porcentaje de trabajadores que no pueden adquirir la canasta de alimentos recomendables con su salario, se incrementó en un 32.7 por ciento.
• Buena parte de ese deterioro salarial se debe a que no se generan los empleos suficientes. Durante la gestión del autodenominado “presidente del empleo”, el blanquiazul Felipe Calderón, se incrementó en 3 millones 411 mil personas la economía informal e ingresaron 2 millones 137 mil al desempleo abierto.
• Durante el gobierno de FCH, de 2007 a 2013 aumentaron 2.97% los mexicanos que ganan hasta 2 salarios mínimos, mientras los mexicanos que ganan de 3 salarios mínimos a más de 5 salarios mínimos disminuyeron en 23%. Estas cifras nos revelan un empobrecimiento de la clase media mexicana.
• Con la política salarial asumida durante la gestión de Felipe Calderón se requerían de 26 años para hacer que el salario tuviese otra vez el poder de compra de 1987.
• Durante los sexenios de Fox y Calderón la alta burocracia en el gobierno federal creció en un 127%: de 4 mil 177 a 9 mil 498 puestos de subsecretario, director general, director adjunto y homólogos que según la OCDE son los mejor pagados de América Latina.
Eso revela que esos doce años el PAN sí se preocupó del salario…de los altos funcionarios salidos de él.
4. En cuarto lugar, en este punto, no se requiere de ninguna consulta, lo que se requiere es aplicar le ley. El Art. 123 constitucional establece con toda claridad que la remuneración debe de ser suficiente para que un jefe de familia pueda proveer de alimento, educación vivienda y hasta de actividades recreativas a su familia. En contraste la Comisión Económica para América Latina señala que México es el único país de América Latina donde el salario mínimo está por debajo de la línea de la pobreza, pues quien percibe hasta dos salarios mínimos no puede adquirir los alimentos que recomienda la CAR. Y en México son diez millones 349 mil trabajadores que se ubican en este rango. Vaya otra numeralia:
• El 16 de diciembre de 1987 un trabajador tenía que laborar 4 horas con 57 minutos por día para poder comprar una CAR, el mismo trabajador 27 años después (al 12 de abril del 2014) requiere trabajar 22 horas para poder comprar la CAR completa, lo que representa un incremento del 400%, es por este motivo que hoy se necesitan hasta tres miembros de una familia para que contribuyan con el ingreso familiar.
• Consumo de leche: en 32 años se han dejado de consumir prácticamente 14 litros de leche por día: de 18.6 litros en 1982, a 4.7 en 2014.
• Tortillas: el 1 de enero de 1982, una familia compraba con un salario mínimo diario 50 kilos de tortillas, para abril de 2014, con un salario mínimo adquiría sólo 5 kilos 800 gramos.
• Frijol: con un salario mínimo en 1982 se podían adquirir 11 kilogramos; en abril de 2014, sólo 3 kilos 300 gramos.
• Huevo: en 1982 un trabajador con un salario mínimo podía comprar 8 kilos y medio, para 2014, sólo 2 kilos 400 gramos, es decir, 71% menos.
Entonces que no se quieran vestir oportunistamente con consultas sobre el aumento salarial quienes junto con los gobiernos de De la Madrid, Salinas, Zedillo y Peña, han contribuido a deteriorarlo. Urge aumentar los salarios, urge cumplir la Ley en la materia. Nada más, pero nada menos.