Esta semilla estuvo a punto de extinguirse; la asociación Tortilla de Maíz Mexicana presidida por el Rafael Mier consiguió retomar la primera cosecha este año.
Podría parecer una noticia simple, conseguir una cosecha. Sin embargo, el rubo de la autonomía alimentaria es hoy uno de los más grandes cambios de paradigma. Con la importación de semillas de grandes empresas ha ido paulatina, y silenciosamente, perdiéndose el cultivo de semillas nativas en cosechas a menor escala.
Lo anterior ha desarraigado a generaciones enteras de la tierra, y también orillado a que consumamos mayormente maíz que no es mexicano, por ejemplo. Cuando las personas dejan de cultivar van perdiéndose las semillas nativas, con ello la diversidad de estas, y sus enormes beneficios nutritivos.
El empresario Rafael Mier desde hace unos años ha estado promoviendo el culivo de semillas nativas para rescatar el maíz en México, recuperar las semillas ancestrales y el contacto con la tierra.
Su mayor esfuerzo lo ha centrado hasta ahora desde su organización Tortilla de Maíz Mexicana en recuperar el maíz palomero. Este último era usado desde tiempos prehispánicos; Fray Bernardino de Sahagún lo refiere como flor de maíz; se vendía en las plazas, era ornamento de collares y rituales.
De este maíz hoy solo el 10% es originario y el resto de importación de Estados Unidos. Mier recorrió distintos pueblos en Toluca para conseguir semillas y sembrar, aunque encontró que prácticamente muy pocas personas contaban con semillas. Consiguió entonces muestras en el banco de semillas CIMMYT y el Colegio de Posgraduados: 20 colectas de cosechas de las décadas desde los 40, 50 y 60´s.
En un incio el escepticismo de Mier se centraba en si estas semillas tendrían la capacidad de reventar. Sin embargo en estos días, a la par que en todo el país se realizan las primeras cosechas de maíz (con las primeras elotadas), la Asociación Tortilla de Maíz Mexicana, y el mismo Mier, anunciaron que consiguieron la primera cosecha de maíz palomero 100% de los últimos años en sus redes sociales:
Con gran orgullo les compartimos la cosecha de las primeras mazorcas de maíz palomero toluqueño. Este es uno de los maíces más antiguos y de donde se originaron las palomitas que se siembran hoy en día en todo el mundo. Gracias al apoyo del CIMMYT pudimos obtener las semillas para iniciar este proyecto de recuperación, esperando que en pocos años México vuelva a sembrar y comer sus maíces palomeros.
Se trata del primer paso de rescate de esta semilla milenaria. Este acto, además, es una manera de hacer conciencia en México sobre retomar la autonomía en la alimentación; las semillas propias, nativas; y del propio valor de la agricultura y de la tierra más allá de la industrialización.
Fuente: masdemx.com