El exdirector de Fideapech que estaba preso por haberse involucrado en la red de corrupción creada por el exgobernador de Chihuahua, César Duarte Jáquez, murió por Covid-19, informó la Fiscalía del Estado.
Luego del deceso, las autoridades penitenciarias iniciaron un protocolo emergente, ya que en el área en que se encontraba la víctima de coronavirus, es la misma que ocupan otros exservidores públicos y empresarios, todos presos por el mismo delito de peculado, y que formaban parte del selecto grupo de amistades de Duarte Jáquez.
La Fiscalía informó que se trata de José Lázaro Joaquín López R., quien fue director del Fideicomiso para el Desarrollo de las Actividades Productivas de Chihuahua (Fideapech), el cual enfrentaba el proceso penal en el Centro Reinserción Social número uno, ubicado en Aquiles Serdán.
La autoridad anunció que luego del deceso s implementó un programa para la detección de casos con síntomas de Covid-19, aislamiento en áreas específicas y aplicación de pruebas, para identificar casos que requieran una atención especial por morbilidades preexistentes y evitar la propagación del virus, mediante un seguimiento por parte de médicos asignados al Cereso.
De acuerdo con el expediente clínico, el martes 25 de agosto fue trasladado al hospital, con diagnóstico de Covid-19, con hipertensión, lo que se agravó, por lo que fue necesario intubarlo el miércoles, día en que murió.
Además, se dispuso un lugar de aislamiento para las personas confirmadas y otras más, para casos con sospecha, muchos de los cuales compartían celda y espacio con la persona muerta.
Varios de los reos procesados por peculado, han solicitado reiteradamente llevar el proceso en sus hogares, ya que la mayoría son personas mayores de 50 años y padecen enfermedades clasificadas como de comorbilidad con el coronavirus.
La Fiscalía anunció que “a quienes se encuentran en el módulo en donde se alojaba la persona que sufrió complicaciones en su salud, ya se les realizaron las pruebas para detectar los casos que pudieran resultar positivos y se encuentran bajo vigilancia médica”.
Inculpan al gobierno estatal
La muerte del exdirector del Fideapech) fue confirmada por su abogado, Agustín Marván, quien calificó el deceso como un crimen ordenado por el propio Gobierno del Estado.
Dicha acusación, dijo, por “negarse a garantizar las medidas sanitarias dentro del penal e impedir que tanto a su cliente como a otros detenidos se les dictaran medidas cautelares diferentes a la prisión, al menos para enfrentar la emergencia sanitaria”.
Marván aseguro que al exfuncionario no se le atendió hasta que promovió un amparo, pues era hipertenso y se consideraba dentro del grupo vulnerable; pese a ello sólo se le atendió dentro del penal y de forma deficiente, incluso le dieron un medicamento contraindicado por su padecimiento, lo que le afecto aún más la presión arterial.
El abogado informó que además desde hace un mes se había insistido en el cambio de la cautelar de prisión preventiva, pero la jueza María Alejandra Ramos Durán se negó a la petición, por ello, adelantó que se analizan las vías jurídicas para proceder contra las autoridades que propiciaron el deceso.
El acusado permanecía detenido desde el mes de marzo de 2018, cuando se le detuvo por el delito de peculado agravado. Era señalado por un presunto desvío de seis millones de pesos del Fideapech a la Unión Ganadera División del Norte, que encabezaba el exgobernador César Duarte.
Fuente: Excélsior/ El Diario
