La policía de Boston prácticamente sitió la ciudad, en una búsqueda masiva del sospechoso identificado como Dzhokhar A. Tsarnaev, de 19 años en el barrio de Watertown y sus alrededores en Boston. Se le considera extremadamente peligroso.
Uno de los sospechosos en los atentados de Boston, el identificado por la gorra negra, murió en un tiroteo con la policía, mientras el sospechoso número dos, el de la gorra blanca, huyó y es buscado por las autoridades casa por casa.
La búsqueda masiva en la que participan miles de policías se realiza en el barrio de Watertown cercano al Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT, en sus siglas inglesas), donde se advirtió a los vecinos que no abriesen las puertas de sus casas, a menos que se tratara de policías plenamente identificados, ya que la situación era inestable.
La cacería se inició a eso de las 10:30 p.m. del jueves cuando una tienda de conveniencia 7-Eleven en el barrio de Cambridge fue asaltada por los sospechosos. Minutos más tarde, un policía de MIT que respondió a la emergencia murió cuando fue recibido a balazos.
Los terroristas huyeron a bordo de un automóvil Mercedes-Benz con el dueño del vehículo abordo, pero fueron avistados en Watertown donde se batieron a balazos con la policía, incluso lanzando granadas en algún momento. El sospechoso número uno fue herido por la policía y llevado al Centro Médico Beth Israel donde fue recibido en condición crítica, con paro cardíaco, múltiples heridas de bala y de algún tipo de explosión en el pecho.
En una conferencia de prensa, los médicos del hospital dijeron que todavía no se había establecido la identidad del sospechoso muerto y no quisieron aventurarse a establecer la causa exacta de su muerte más allá de “trauma significativo”, aunque la sospecha es que portaba explosivos como los de los atacantes suicidas.
La policía acordonó amplios sectores de la ciudad, incluyendo los barrios de Belmont, Cambridge, Watertown, y Brighton, prohibió la entrada del transporte público y urgió a la gente a quedarse dentro de sus casas y a los negocios a no abrir hasta nueva orden.
Las escuelas públicas también están cerradas y las autoridades reiteran a los residentes que se mantengan en sus hogares. La gran preocupación es que el sospechoso, de 19 años no solo estaría armado sino portaría explosivos.
La situación es todavía muy fluida y se espera más información a lo largo del día.
Fuente: Voz de América