El senador del Partido del Trabajo señaló que la información publicada por Proceso corresponde a un ataque de la actual administración de Peña Nieto por su postura contraria a la aprobación de la Reforma Energética.
Este lunes por la mañana en entrevista con la titular de Primera Emisión de Noticias MVS, Carmen Aristegui, Manuel Bartlett Díaz se defendió en contra de las acusaciones que publicó Proceso en su edición más reciente, señalando que “todo lo publicado por Proceso es falso”.
El senador del Partido del Trabajo (PT) afirma que Enrique Peña Nieto y Miguel Ángel Osorio Chong, presidente de la República y el secretario de Gobernación respectivamente, son los responsables de su desprestigio, por oponerse a la Reforma Energética.
“Es un asunto falso” señaló Bartlett Díaz con respecto a las afirmaciones de que estuvo presente durante la ejecución y tortura de Enrique Kiki Camarena.
Y remató:
“Esto proviene de Salinas de Gortari, en este asunto que no tiene ni pies ni cabeza, que sale precisamente ahora en mi lucha contra la entrega del petróleo de Peña Nieto y su grupo. No me van a callar la boca”.
La politóloga Denise Dresser y colaborada del semanario Proceso, señaló que esta revista nunca se prestaría ha “hacer el trabajo sucio” del gobierno de Peña Nieto. Le dijo a Bartlett que parece que tiene dos caras y afirma que esta figura que trata de parecer públicamente como progresista “tiene muchos esqueletos en el clóset”.
Bartlett descartó la opinión de la comunicadora y colaborada de Carmen Aristegui como “una posición política” de lealtad hacia el semanario.
Sergio Aguayo, colaborador del espacio noticioso, dijo que era valiente por salir a defender su postura y señaló que el núcleo del problema por el que continúan surgiendo esta clase de informaciones se debe al papel que tuvieron los políticos y funcionarios en la gestación y crecimiento del crimen organizado en México y detalló que “esta bomba tronó” es en 1985 cuando Bartlett era secretario de Gobernación.
Lo cierto es que existe una nube que no ha sido esclarecida de cual ha sido ese papel y la evidencia demuestra una complicidad abierta del gobierno mexicano con el narcotráfico de Rafael Caro Quintero, señaló Aguayo Quezada.
“Es un caso juzgado donde están en la cárcel gentes por más de treinta años, mi actitud es altamente clara y yo desparecí la Dirección Federal de Seguridad (DFS), yo ataqué el problema como nunca se había hecho, así que no hay tal nebulosidad”, puntualizó Bartlett Díaz.
“Esto es la venganza del gobierno mexicano”, insistió el senador del PT.
Lorenzo Meyer señaló que este tipo de noticias ponen al descubierto la red de cobertura que tienen los servicios de inteligencia de los Estados Unidos y afirmó que la relación entre la DFS y el narcotráfico llegó a tal nivel de corrupción que la única alternativa que tuvo el gobierno mexicano de entonces, fue la desaparición de la dependencia.
“De no haber torturado y ejecutado a Kiki Camarena no habría sido necesario desparecer la DFS” concluyó Meyer.
Fuente: MVS Noticias y SDP Noticias