La policía de Ferguson, Missouri, arrestó anoche a 31 personas en las protestas en ese suburbio de la ciudad de San Luis, que de nueva cuenta registró el lanzamiento de bombas molotov.
Ron Johnson, capitán de la Patrulla de Caminos de Missouri, en conferencia de prensa la madrugada de este martes, sugirió que las protestas se hagan durante el día, a fin de que la pequeña minoría de instigadores de los disturbios no puedan ocultarse entre los manifestantes pacíficos.
Las manifestaciones, en su mayor parte pacíficas pero con arrebatos de violencia por parte de pequeños grupos, se han extendido desde que Michael Brown, de 18 años, murió baleado durante un incidente con un policía en un coche patrulla mientras paseaba por una calle residencial en Ferguson el 9 de agosto.
En respuesta a las bombas incendiarias de fabricación casera, la policía desplegó artefactos de ruido aturdidor y disparó granadas de destellos y gas lacrimógeno hacia las 23:00 horas, informó uno de los reporteros de la televisora local KMOV.
A la media noche los reporteros que cubrían los hechos recibieron la orden de la policía de dejar el lugar donde se realizaban los arrestos y dirigirse al punto de mando.
En la conferencia de prensa, precedida por una plegaria, Johnson habló frente a una mesa donde había bolsas de plástico transparente que permitían apreciar una bomba molotov y dos pistolas decomisadas esta noche.
La televisora entrevistó a un manifestante procedente de Austin, Texas, identificado solo como Billy, quien dijo que llegó al suburbio de San Luis para ayudar tras ver como eran tratados quienes protestaban.
Precisó que su apoyo consistía en ayudar a los jóvenes a canalizar sus emociones, y hay que hablar con ellos, ayudarlos, insistió tras descartar que hubiera algún grupo incitando a la protesta. De acuerdo a KMOV, Billy fue arrestado poco después.
Johnson añadió que dos personas fueron heridas de bala aunque dijo desconocer su condición, mientras cuatro policías resultaron con heridas por golpes de piedras o botellas lanzadas por los manifestantes, y aseguró que la policía no hizo un solo disparo.
Afirmó que varios de los detenidos esta noche procedían de lugares tan distantes como Nueva York o California, y señaló que la prensa se había puesto en riesgo y a los oficiales también, al no abandonar las áreas cuando se les solicitaba.
De acuerdo a un reporte, durante la tarde de este lunes se estimó que había un centenar de manifestantes, menos que el número de reporteros, fotógrafos y camarógrafos que informaban sobre su actuación.
El pasado 9 de agosto un oficial de policía detuvo y dio muerte al presunto autor del robo de una caja de puros con 49 dólares de precio, el cual se encontraba desarmado pero recibió seis disparos, dos de ellos en la cabeza, según una autopsia ordenada por la familia.
Fuente: Notimex