Por Francisco Javier Pizarro Chávez
Como es de conocimiento público, el presidente Andrés López Obrador, ha puesto en marcha la consolidación de la 4ta Transformación con base en la “Revolución de la Consciencia Social” en lo que resta de su sexenio, con fundamento en la democracia participativa de los ciudadanos, no de la democracia representativa electoral del sistema de partidos.
Chihuahua en el periodo de la “Guerra sucia” de 1965 y 1972, creada por los gobernadores Práxedes Giner Duran y Oscar Flores Sánchez en contra de las guerrillas de Arturo Gámiz y Diego Lucero, fue una de las entidades que aportó en ese período, la “democracia participativa” de los ciudadanos, con la creación de dos ejes fundamentales: la Comisión de Defensa del Pueblo y la Asamblea Popular, los cuales crearon el Tribunal Popular Nacional.
El CDP cobró fuerza en el movimiento de masas donde coexisten las más variadas fuerzas sindicales, estudiantiles y populares, con una múltiple gama de posiciones políticas en su seno.
El programa de acción sobre el cual se aglutinó, fue un programa solidario que tuvo como objetivo los intereses más inmediatos de las masas y hacer frente a la represión. A mediados del mes de febrero de 1972, apoya la demanda del pueblo, esto es, “una política más apegada y de más amplio contenido popular”.
A partir de ello, se constituyeron los Comités de Barrios de la Colonia Campesina, la Dale, Barrio de Londres, Cerro de la Cruz, Barrio de la Empacadora, la Industrial, Nombre de Dios y el Barrio del Palomar. Comités de Barrios cuya organización e integración al CDP abordaron demandas concretas, como la instalación de servicios públicos, escuelas, transportes y otras comunes y necesarias a los habitantes de las colonias referidas.
Pero no solo eso. También el CDP extendió su organización a otras ciudades del Estado, en Delicias, Anáhuac, Jiménez Camargo, Hidalgo del Parral, Distrito Flores Magón, y Cd. Juárez. En los municipios agropecuarios se apoyaban las demandas de solicitudes de tierra o la expropiación de esas de grupos campesinos como “El Grupo Independiente Pancho Villa” y el “Grupo Independiente Rubén Jaramillo”.
El CDP de Cd. Juárez, nació en forma autónoma de la “Alianza Cívica Demócrata Juarense” movimiento democrático que arrastró tras de sí una gran base popular en la Ciudad Juárez de los sectores obreros, magisteriales y populares y, también, del Valle de Juárez que tenía una extensión de 25 mil hectáreas, alimentado por el Rio Bravo que fomentaba los cultivos del algodón, trigo, alfalfa y el sorgo. La mayoría de esas tierras, estaban como siempre en manos de propietarios particulares y sólo una pequeña parte en manos de ejidatarios.
Del mes de febrero de 1972, a los inicios del Tribunal Popular Nacional, el CDP de Chihuahua emprendió luchas y movilizaciones relevantes: participó en la realización del movimiento huelguístico universitario que se llevó a cabo contra las autoridades universitarias (Rectoría y Junta de Gobierno).
Realizó también manifestaciones, mítines y propaganda de los estudiantes del Tecnológico de Chihuahua que iniciaron una “huelga de hambre” el 3 de mayo que culminó el día 8 del mismo mes, en el que contingentes estudiantiles y populares del CDP ocuparon el Palacio de Gobierno. El gobierno cedió a todas las peticiones.
La ocupación del Palacio de Gobierno, fue una de las principales acciones del CDP de Chihuahua, ya que el movimiento popular pudo comprobar en la práctica cual era la correlación de las fuerzas sociales y su importancia desde el punto de vista político, lo que, en aquel entonces, se consolidó la “revolución de la conciencia social”, que históricamente es la potencialidad de fuerza con que cuenta el pueblo para fortalecer su democracia participativa.
La solidaridad del pueblo con los estudiantes, con los campesinos, los trabajadores –en particular de los ferrocarrileros- fue masiva e incondicional, por lo que la fuerza pública se abstuvo obligadamente “reprimir al pueblo”, aunque esa abstención fue temporal.
Desafortunadamente, después ya no hubo nada al respecto de la “revolución de la conciencia social”. Las luchas reivindicativas de Cd. Juárez a lo largo de aquellos años es difícil de realizar en una ciudad que alcanza ahora, índices alarmantes de prostitución, drogadicción y crimen social, como el que se redujo hace unos días, al igual que el de Guadalajara, Guanajuato, Baja California y demás entidades.
Veremos y diremos si los neoliberales y partidos de la derecha violentan al pueblo para que no se consolide la “revolución de la conciencia de la 4ta transformación y la elección presidencial de 2024”, a las que tanto odian al gobierno morenista y agreden a los ciudadanos humildes, con la ayuda de los grupos del narcotráfico y los lumpen e incluso la CIA que les suministran armas por doquier no solo en contra de Rusia y China, sino también a nuestra patria a la que cuestiona su soberanía y requieren sus recursos naturales.