El secretario de Seguridad Nacional Jeh Johnson estudia la posibilidad de limitar la deportación de inmigrantes que residen sin permiso en Estados Unidos y que no tengan antecedentes penales peligrosos, según dos personas al tanto de las deliberaciones.
El cambio, si se adopta a raíz de una revisión en curso ordenada por el presidente Barack Obama, podría proteger a decenas de miles de inmigrantes que ahora son deportados cada año por el mero hecho de cometer repetidamente infracciones de inmigración, como volver a entrar en el país sin autorización legal después de haber sido expulsados, no cumplir con una orden de deportación o no asistir a una cita de la corte de inmigración.
Sin embargo, no llegaría a concretar los cambios radicales que buscan los activistas. Ellos quieren que Obama amplíe un programa de dos años que otorga permisos de trabajo a ciertos inmigrantes traídos sin permiso cuando niños para que incluya a otros grupos, como los padres de todos los niños nacidos en Estados Unidos.
John Sandweg, quien se desempeñó hasta febrero como director interino de la Policía de Inmigración y Aduanas de Estados Unidos, dijo que había promovido el cambio de política para los inmigrantes sin antecedentes penales graves antes de su partida, y que estaba siendo sopesado por Johnson. Un abogado de inmigración que ha discutido la revisión del gobierno también ha confirmado que ese cambio está bajo revisión. El abogado habló bajo condición de guardar el anonimato porque los procedimientos son confidenciales.
“Cualquier informe de consideraciones específicas en este momento sería prematuro”, dijo el lunes Clark Stevens, portavoz del Departamento de Seguridad Nacional. Stevens dijo que Johnson “ha sido objeto de un proceso muy riguroso e incluyente para informar mejor la revisión”, incluyendo la búsqueda de las aportaciones de las personas dentro del Departamento de Seguridad Nacional, así como legisladores de ambos partidos y otros grupos de interés.
El enfoque esbozado por Sandweg y el abogado de inmigración cambiaría las categorías prioritarias existentes, que ahora incluyen a los inmigrantes que han reingresado en el país después de haber sido expulsados anteriormente y aquellos que están prófugos por procedimientos de inmigración. Tales personas saldrían de la lista de prioridades.
Fuente: AP