La semana próxima, el presidente Andrés Manuel López Obrador enviará una carta a Joe Biden proponiéndole que inicie ya una nueva política migratoria de cooperación para el desarrollo, cuyo objeto será abundar en la resolución de las causas de la migración desde Centroamérica rumbo a Estados Unidos. Y en unos tres meses generar 330 mil empleos en el istmo centroamericano.
En su conferencia de prensa matutina subrayó que su orden es que las autoridades del gobierno encargadas de la migración, respeten los derechos humanos. Y a eso, sumó que no se permite en su administración la represión a los migrantes, menos la violencia en contra de ellos, y más aún las agresiones que puedan provocar lesiones graves.
El propósito del gobierno mexicano, es “mantener hasta donde sea posible a los migrantes en la frontera sur del país, porque permitir que atraviesen el país significa muchos riesgos de violacion de derechos humanos, sobre todo en la frontera norte.
“A los medios de comunicación no les conviene recordar el fusilamiento de migrantes en los gobiernos anteriores, en San Fernando, Tamaulipas. Y recientemente unos migrantes fueron quemados en la frontera de Tamaulipas.”
De tal forma López Obrador reiteró su propuesta para implementar el Programa Sembrando Vidas en Guatemala, El Salvador y Honduras. Ejemplificó con lo que sucede en Chiapas -lo cual sería replicado en esos tres países-:
Se han sembrado árboles en 200 mil hectáreas y se ocupan a 80 mil sembradores; además en el estado sureño de México también se ocupa a 30 mil jóvenes, en el Programa, Jóvenes Sembrando el Futuro.
Así, en la carta que López Obrador enviará a Biden, se propone que en las tres naciones centroamericanas se multiplique la cantidad de personas ocupadas -y con ello se consiga que no migren-, para que sumen 240 mil contratados en Sembrando Vida, en 600 mi hectáreas divididas en los tres territorios nacionales. Y también se contrate a 90 mil jóvenes en Jóvenes Sembrando el Futuro, en Guatemala, Honduras y El Salvador.
En tan solo tres meses, señaló, se ocuparía a 330 mil personas en el istmo centroamericano. Esa será la propuesta que el presidente mexicano hará llegar a Biden en los próximos días.
Fuente: La Jornada