Mientras decenas de miles de fieles acudieron a las exequias de cuerpo presente de Benedicto XVI en la Basílica de San Pedro, el proceso por presunto encubrimiento de abusos contra el papa emérito sigue abierto por ahora, afirmó un funcionario judicial.
“Es cierto que, en principio, se produce una interrupción con la muerte de una de las partes”, indicó la portavoz del Tribunal Regional de Traunstein, en Baviera, Andrea Titz, quien citó el código de derecho civil de Alemania.
Si bien puntualizó que “en el caso esto no se aplica, ya que el difunto fue representado por un abogado”.
Joseph Ratzinger falleció el 31 de diciembre a los 95 años y tenía la intención de defenderse de las acusaciones, por lo que había contratado a un bufete de abogados para que lo representara.
Con información de Europa Press
